/ viernes 2 de octubre de 2020

Admiro la valentía de las mujeres que manifiestan sus heridas: Melissa del Mar

Joven poeta mexicana cuyo trabajo ha sido reconocido en México, Costa Rica, Estados Unidos, Argentina, Colombia y Chile

Para Melissa del Mar Pontigo Torres, escritora nacida en España y criada en México, la poesía es un espacio para dialogar y conversar con los demás. Pretende, a través de sus textos, conocer el origen y el olvido que se ha colocado a las voces minoritarias.

Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí́

El yo-poético para ella es la voz que nos habita y que permite relacionarse al escritor con el lector, tarea en la que imprime mayor énfasis para un discurso recíproco.

¿Por qué eres poeta?

Soy poeta porque en el acompañamiento de la poesía encuentro la posibilidad de entender el contexto que habito, repensarlo y replantearlo. Escribo poesía porque así me puedo encontrar a mí misma y a todas a las que borraron, a las que no incluyeron en antologías de poesía. Soy poeta porque en el poema puedo dejar testimonio de esta realidad en la que, día tras día, otra de nosotras falta. Y, sobre todo, escribir poesía como mujer me permite borrar lo que, como dijo Gloria Anzaldúa, erróneamente de mí se ha dicho, y en su lugar, escribir lo que sí soy.

¿Quiénes son tus autores o autoras preferidas?

No podría indicar a mis autoras favoritas, porque son muchas y no habría espacio para nombrarlas a todas, pero las que han marcado mi 2020, ya que, son autoras a las que volví a acudir en busca de respuestas. Ellas son Daniela Tarazona, Natalia Toledo, Fernanda Melchor, Yásnaya Aguilar, Luza Alvarado, Verónica Gerber y Abril Medina.

¿Cómo decidiste dedicarte a la literatura?

Hace aproximadamente 5 años estaba tomando asesoría con un profesor y le pregunté sobre técnicas, métodos y acciones que yo podía realizar para mejorar en su materia. Él me contestó que dejara de leer y escribir poesía. Ese día decidí que iba a dedicar mi tiempo y vida a la creación, difusión y reivindicación de la poesía.

¿Cuál es tu opinión de las lecturas en vivo?

Sobre las presenciales, puedo decir que las extraño. Me gustaba mucho poder entablar conversaciones con el público y con otras ponentes después del evento. Y, ahora, las versiones a distancia me parecen una muy buena oportunidad para conectarse con personas de otros países. En fin, en este caso, quizá más importante que el medio, es el mensaje.

¿Además de la poesía, cultivas otro género?

En el contexto académico se me pide constantemente redactar ensayos. Reconozco que me hace falta investigar y conocer más al respecto. Lo cierto es que me interesan mucho y es probable que, en un futuro cercano, vayan a ver más de mí en el ensayo.

¿Las poetas escriben de día o de noche?

En mi caso, a cualquier hora que tenga libre. Incluso sin tiempo libre, intento encontrar algún espacio para escribir. En una lectura de poesía, Tzuara de Luna y Mariel Damián comentaron que en muchas ocasiones tenemos que robarle horas al día o la noche, según sea el caso. Coincido con ello, a veces nuestro día a día está tan saturado de labores inmediatas y pasajeras, que buscar un espacio para hacer lo que nos apasiona se torna en algo necesario.

¿Y las poetas que además estudian, como tú, a qué hora lo hacen?

Dependo mucho de las exigencias y disponibilidades del semestre en el que me encuentre. Dado que ya estoy a un año de graduarme de la carrera, mis clases tienden a ser impartidas en las noches, así que, en este ciclo tengo mucha disponibilidad en las mañanas para poder organizar eventos, talleres y escribir.

Cortesía | Víctor Cerón

¿Crees que se aprende a escribir con creatividad en los talleres?

Creo que escribir, podemos todas las personas. Pero el escribir desde nuestra voz y hacerla visible a través de la poesía no es tan sencillo. Porque, sobre todo como mujeres, hemos estado sometidas a la condición de que sean otros quienes hablen por nosotras. Por ello, a veces necesitamos que alguien nos guíe, nos ayude a detonarlo y acompañe en ese sendero que nos lleva a conocer nuestra propia voz. En mi caso, Luza Alvarado y Astro Damus lo han sido. En sus talleres, encontré la posibilidad de detonar mi voz, de abordar a la palabra desde lugares que no había considerado, visiones que no tenía contempladas y creo que, a través de ello, la creatividad se torna inevitable.

¿Cuál es tu opinión de los movimientos sociales encabezados por mujeres?

Admiro la fuerza y valentía de las mujeres que se agrupan y manifiestan sus heridas, sus muertes y, la violencia que habita en nuestros diferentes contextos. Hace poco leí que basta organizarse con una amiga para armar una revolución y me parece una idea maravillosa. Además, el generar vínculos de sororidad y llevarlos a la acción a través de la manifestación es una manera de visibilizar nuestras dolencias, de fortalecer nuestros lazos y de reconstruir los arquetipos y estereotipos sobre la mujer. Y si se busca que este comentario también responda a mi opinión sobre la reapropiación de monumentos, del arte y la toma del CNDH, me gustaría contestar con lo que leí la semana pasada en Primera Página: “El arte no se puede pensar fuera de una posición política. El patrimonio cultural lo creamos todos y nos pertenece a todos, no solo al Estado".

Reitero, admiro la valentía de las mujeres que, cansadas de ser silenciadas, muestran su herida. Solo puedo concluir esta respuesta con una oración que he escuchado de muchas mujeres hablantes de lenguas originarias: en un contexto en el que a las mujeres se nos enseñó a ser silentes, alzar la voz, es un acto revolucionario y de resistencia.

¿Y del uso de las nuevas tecnologías para acceder a la literatura, qué opinas?

El mundo cambia, y, si no nos ajustamos en ciertos aspectos a lo que se pide, poco a poco nos volvemos obsoletos. Creo que la literatura ha sabido aprovechar nuevas tecnologías sin dejar su esencia a un lado. Al adaptarse a los cambios tecnológicos se permite que la literatura se vuelva más accesible en muchos sentidos, como el económico, el geográfico, ambiental, entre muchos otros. De manera que, todo aquel avance desde la tecnología que permita que más personas puedan acceder a un texto literario, yo le recibo con los brazos abiertos.

¿EPUB, PDF o impresos, cómo prefieres los libros?

Podría decir que entre un 30% y 45% de los libros que he leído han sido en su formato digital. En la mayor de las ocasiones, ha sido porque el libro está agotado o no hay existencias en su versión impresa en la región en la que vivo. En lo personal, prefiero que el libro sea impreso, pero también disfruto mucho leerlo en digital.

¿Crees en que los seres humanos necesitan a la poesía?

Hace aproximadamente un año tuve la oportunidad de dar una charla para Tedx, en donde precisamente, hablé sobre el impacto positivo que tiene la poesía en la vida de las personas. En la charla mencioné que las personas no tenemos una necesidad fisiológica por la poesía; de manera que, como tal, no la necesitamos. Es decir, resumir a la poesía como una necesidad podría resultar problemático. Por eso es que muchas escuelas de educación básica fracasan en su intención por hacer que su alumnado se sienta interesado por leer poesía. Porque, contrario a mostrar los beneficios que pueden obtenerse a través de la lectura de poemas, se les obliga a leer poesía y asociarla con una necesidad abstracta.

¿Consideras que las editoriales deben apostar más por los jóvenes escritores?

Sí, afortunadamente conozco a varias que lo hacen. Me emociona la idea de que, en un futuro cercano, pueda trabajar con ellas y publicar poemarios. Mi primera aparición en un texto será en la antología Novísimas, que publica la editorial Los libros del Perro. La cual es, precisamente, una de las editoriales que considero que apoya a las voces jóvenes y emergentes.

¿Algún consejo a los nuevos escritores o escritoras?

Organizarse. Encontrar a personas que tienen las mismas pasiones y organizarse: creo que ahí está la clave. Considero que ello me ha permitido crecer con mayor fuerza. Además, crecer en colectivo te permite desarrollarte en un espacio seguro, con gente en la que confías y que tienen el mismo objetivo que tú.

¿Antes de escribir, realizas una planeación de lo que será tu obra final?

No necesariamente. En realidad, lo que surge primero son las palabras, no tanto la imagen completa. Es decir, brotan palabras, las anoto en una libreta que siempre traigo conmigo y, una vez que considero que ya hay suficientes palabras, me siento a redactar. Y, es en ese proceso de redacción y escritura que, me doy cuenta de la imagen que generan las palabras cuando se comunican entre ellas. Sin embargo, también hay casos en los que de mi herida crece un poema. Es decir, que, con plena conciencia escribo un poema que pueda exponer algún dolor. De situaciones así han surgido mis textos «Atardecer de Nahuales» y «Hoy, como entonces».

¿Existe la inspiración?

Creo que sí. A mí, por ejemplo, me inspira la fuerza y valentía de las mujeres de mi vida. El tener conversaciones con ellas ha detonado varios de los poemas o la temática de los mismos. Cada proceso creativo es diferente, pero yo, precisamente en la oralidad del diálogo encuentro mucha inspiración.

¿Qué bebe una poeta cuando está escribiendo?

Dado que, no tengo horario para la poesía, esta puede tocar a mi puerta a cualquier hora, es posible que me encuentre tomando té o agua. Y ya que, el agua habita con frecuencia mis textos, tomarla es una manera de invitarla a pasar.

¿Qué va a encontrar un lector en tu trabajo poético?

Herencia, hierba y herida. Creo que en dichas palabras se puede concretar mi trabajo poético; me gusta pensar que las tres habitan mis textos. En algunas ocasiones se manifiestan más unas que otras, pero de alguna u otra manera busco encontrarlas cuando escribo.

¿Qué aconsejarías a una persona joven, que, como tú, que se siente por primera vez frente a una computadora o una máquina de escribir para escribir su primer libro?

Yo les recomendaría que no se presionen por escribir de alguna manera en particular, la palabra fluye cuando se le busca sin presiones, cuando no se le obliga. Ahora, por supuesto que se puede escribir sobre encargo, pero, me parece que si lo que se busca es disfrutar el proceso de escritura, lo ideal es no forzarlo, dejar que fluya y nunca dejar que nuestra voz sea silenciada.

Para Melissa del Mar Pontigo Torres, escritora nacida en España y criada en México, la poesía es un espacio para dialogar y conversar con los demás. Pretende, a través de sus textos, conocer el origen y el olvido que se ha colocado a las voces minoritarias.

Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí́

El yo-poético para ella es la voz que nos habita y que permite relacionarse al escritor con el lector, tarea en la que imprime mayor énfasis para un discurso recíproco.

¿Por qué eres poeta?

Soy poeta porque en el acompañamiento de la poesía encuentro la posibilidad de entender el contexto que habito, repensarlo y replantearlo. Escribo poesía porque así me puedo encontrar a mí misma y a todas a las que borraron, a las que no incluyeron en antologías de poesía. Soy poeta porque en el poema puedo dejar testimonio de esta realidad en la que, día tras día, otra de nosotras falta. Y, sobre todo, escribir poesía como mujer me permite borrar lo que, como dijo Gloria Anzaldúa, erróneamente de mí se ha dicho, y en su lugar, escribir lo que sí soy.

¿Quiénes son tus autores o autoras preferidas?

No podría indicar a mis autoras favoritas, porque son muchas y no habría espacio para nombrarlas a todas, pero las que han marcado mi 2020, ya que, son autoras a las que volví a acudir en busca de respuestas. Ellas son Daniela Tarazona, Natalia Toledo, Fernanda Melchor, Yásnaya Aguilar, Luza Alvarado, Verónica Gerber y Abril Medina.

¿Cómo decidiste dedicarte a la literatura?

Hace aproximadamente 5 años estaba tomando asesoría con un profesor y le pregunté sobre técnicas, métodos y acciones que yo podía realizar para mejorar en su materia. Él me contestó que dejara de leer y escribir poesía. Ese día decidí que iba a dedicar mi tiempo y vida a la creación, difusión y reivindicación de la poesía.

¿Cuál es tu opinión de las lecturas en vivo?

Sobre las presenciales, puedo decir que las extraño. Me gustaba mucho poder entablar conversaciones con el público y con otras ponentes después del evento. Y, ahora, las versiones a distancia me parecen una muy buena oportunidad para conectarse con personas de otros países. En fin, en este caso, quizá más importante que el medio, es el mensaje.

¿Además de la poesía, cultivas otro género?

En el contexto académico se me pide constantemente redactar ensayos. Reconozco que me hace falta investigar y conocer más al respecto. Lo cierto es que me interesan mucho y es probable que, en un futuro cercano, vayan a ver más de mí en el ensayo.

¿Las poetas escriben de día o de noche?

En mi caso, a cualquier hora que tenga libre. Incluso sin tiempo libre, intento encontrar algún espacio para escribir. En una lectura de poesía, Tzuara de Luna y Mariel Damián comentaron que en muchas ocasiones tenemos que robarle horas al día o la noche, según sea el caso. Coincido con ello, a veces nuestro día a día está tan saturado de labores inmediatas y pasajeras, que buscar un espacio para hacer lo que nos apasiona se torna en algo necesario.

¿Y las poetas que además estudian, como tú, a qué hora lo hacen?

Dependo mucho de las exigencias y disponibilidades del semestre en el que me encuentre. Dado que ya estoy a un año de graduarme de la carrera, mis clases tienden a ser impartidas en las noches, así que, en este ciclo tengo mucha disponibilidad en las mañanas para poder organizar eventos, talleres y escribir.

Cortesía | Víctor Cerón

¿Crees que se aprende a escribir con creatividad en los talleres?

Creo que escribir, podemos todas las personas. Pero el escribir desde nuestra voz y hacerla visible a través de la poesía no es tan sencillo. Porque, sobre todo como mujeres, hemos estado sometidas a la condición de que sean otros quienes hablen por nosotras. Por ello, a veces necesitamos que alguien nos guíe, nos ayude a detonarlo y acompañe en ese sendero que nos lleva a conocer nuestra propia voz. En mi caso, Luza Alvarado y Astro Damus lo han sido. En sus talleres, encontré la posibilidad de detonar mi voz, de abordar a la palabra desde lugares que no había considerado, visiones que no tenía contempladas y creo que, a través de ello, la creatividad se torna inevitable.

¿Cuál es tu opinión de los movimientos sociales encabezados por mujeres?

Admiro la fuerza y valentía de las mujeres que se agrupan y manifiestan sus heridas, sus muertes y, la violencia que habita en nuestros diferentes contextos. Hace poco leí que basta organizarse con una amiga para armar una revolución y me parece una idea maravillosa. Además, el generar vínculos de sororidad y llevarlos a la acción a través de la manifestación es una manera de visibilizar nuestras dolencias, de fortalecer nuestros lazos y de reconstruir los arquetipos y estereotipos sobre la mujer. Y si se busca que este comentario también responda a mi opinión sobre la reapropiación de monumentos, del arte y la toma del CNDH, me gustaría contestar con lo que leí la semana pasada en Primera Página: “El arte no se puede pensar fuera de una posición política. El patrimonio cultural lo creamos todos y nos pertenece a todos, no solo al Estado".

Reitero, admiro la valentía de las mujeres que, cansadas de ser silenciadas, muestran su herida. Solo puedo concluir esta respuesta con una oración que he escuchado de muchas mujeres hablantes de lenguas originarias: en un contexto en el que a las mujeres se nos enseñó a ser silentes, alzar la voz, es un acto revolucionario y de resistencia.

¿Y del uso de las nuevas tecnologías para acceder a la literatura, qué opinas?

El mundo cambia, y, si no nos ajustamos en ciertos aspectos a lo que se pide, poco a poco nos volvemos obsoletos. Creo que la literatura ha sabido aprovechar nuevas tecnologías sin dejar su esencia a un lado. Al adaptarse a los cambios tecnológicos se permite que la literatura se vuelva más accesible en muchos sentidos, como el económico, el geográfico, ambiental, entre muchos otros. De manera que, todo aquel avance desde la tecnología que permita que más personas puedan acceder a un texto literario, yo le recibo con los brazos abiertos.

¿EPUB, PDF o impresos, cómo prefieres los libros?

Podría decir que entre un 30% y 45% de los libros que he leído han sido en su formato digital. En la mayor de las ocasiones, ha sido porque el libro está agotado o no hay existencias en su versión impresa en la región en la que vivo. En lo personal, prefiero que el libro sea impreso, pero también disfruto mucho leerlo en digital.

¿Crees en que los seres humanos necesitan a la poesía?

Hace aproximadamente un año tuve la oportunidad de dar una charla para Tedx, en donde precisamente, hablé sobre el impacto positivo que tiene la poesía en la vida de las personas. En la charla mencioné que las personas no tenemos una necesidad fisiológica por la poesía; de manera que, como tal, no la necesitamos. Es decir, resumir a la poesía como una necesidad podría resultar problemático. Por eso es que muchas escuelas de educación básica fracasan en su intención por hacer que su alumnado se sienta interesado por leer poesía. Porque, contrario a mostrar los beneficios que pueden obtenerse a través de la lectura de poemas, se les obliga a leer poesía y asociarla con una necesidad abstracta.

¿Consideras que las editoriales deben apostar más por los jóvenes escritores?

Sí, afortunadamente conozco a varias que lo hacen. Me emociona la idea de que, en un futuro cercano, pueda trabajar con ellas y publicar poemarios. Mi primera aparición en un texto será en la antología Novísimas, que publica la editorial Los libros del Perro. La cual es, precisamente, una de las editoriales que considero que apoya a las voces jóvenes y emergentes.

¿Algún consejo a los nuevos escritores o escritoras?

Organizarse. Encontrar a personas que tienen las mismas pasiones y organizarse: creo que ahí está la clave. Considero que ello me ha permitido crecer con mayor fuerza. Además, crecer en colectivo te permite desarrollarte en un espacio seguro, con gente en la que confías y que tienen el mismo objetivo que tú.

¿Antes de escribir, realizas una planeación de lo que será tu obra final?

No necesariamente. En realidad, lo que surge primero son las palabras, no tanto la imagen completa. Es decir, brotan palabras, las anoto en una libreta que siempre traigo conmigo y, una vez que considero que ya hay suficientes palabras, me siento a redactar. Y, es en ese proceso de redacción y escritura que, me doy cuenta de la imagen que generan las palabras cuando se comunican entre ellas. Sin embargo, también hay casos en los que de mi herida crece un poema. Es decir, que, con plena conciencia escribo un poema que pueda exponer algún dolor. De situaciones así han surgido mis textos «Atardecer de Nahuales» y «Hoy, como entonces».

¿Existe la inspiración?

Creo que sí. A mí, por ejemplo, me inspira la fuerza y valentía de las mujeres de mi vida. El tener conversaciones con ellas ha detonado varios de los poemas o la temática de los mismos. Cada proceso creativo es diferente, pero yo, precisamente en la oralidad del diálogo encuentro mucha inspiración.

¿Qué bebe una poeta cuando está escribiendo?

Dado que, no tengo horario para la poesía, esta puede tocar a mi puerta a cualquier hora, es posible que me encuentre tomando té o agua. Y ya que, el agua habita con frecuencia mis textos, tomarla es una manera de invitarla a pasar.

¿Qué va a encontrar un lector en tu trabajo poético?

Herencia, hierba y herida. Creo que en dichas palabras se puede concretar mi trabajo poético; me gusta pensar que las tres habitan mis textos. En algunas ocasiones se manifiestan más unas que otras, pero de alguna u otra manera busco encontrarlas cuando escribo.

¿Qué aconsejarías a una persona joven, que, como tú, que se siente por primera vez frente a una computadora o una máquina de escribir para escribir su primer libro?

Yo les recomendaría que no se presionen por escribir de alguna manera en particular, la palabra fluye cuando se le busca sin presiones, cuando no se le obliga. Ahora, por supuesto que se puede escribir sobre encargo, pero, me parece que si lo que se busca es disfrutar el proceso de escritura, lo ideal es no forzarlo, dejar que fluya y nunca dejar que nuestra voz sea silenciada.

Elecciones 2024

AMLO evita abordar el retiro de la candidatura de Cabeza de Vaca: "No nos corresponde"

En la conferencia mañanera dijo que ya habrá tiempo, después de las elecciones, para hablar del tema

Cultura

El origen del nombre 'Tamaulipas': descubriendo el legado de nuestra entidad

Hace 200 años nuestro estado ingresaba al pacto federal como entidad federativa bajo el nombre de Tamaulipas

Local

Transfieren dinero de su graduación a otra cuenta por error, ahora arman lotería en Madero

Lanzaron una convocatoria en redes sociales para juntar el dinero que les falta para hacer su fiesta de graduación

Local

Declaración anual de impuestos: SAT anuncia horarios especiales en Tampico

Conoce los horarios extendidos del SAT ante el cierre de la campaña para presentar la declaración anual 2024

Local

Don Ricardo y su jugo de naranja en la colonia Primero de Mayo: esta es su historia

Vende jugo de naranja a quienes acuden a la colonia Primero de Mayo y se ha convertido en el aliado de los médicos

Elecciones 2024

El agua es un tema propietario de atención: Mónica Villarreal

Buscan disminuir 50 centímetros la bocatatoma, con el fin de poder captar mayor cantidad de agua