¿Bailamos?, hoy como cada 29 de abril desde 1982 en todo el mundo se conmemora el Día Internacional de la Danza, una celebración que busca acercar al público al bello arte del movimiento corporal.
Esta fecha fue instituida a partir de la propuesta del maestro ruso Piepor Gusev de Leningrado, que tenía como único objetivo, homenajear al gran innovador del ballet clásico, el coreógrafo francés Jean Georges Noverre, nacido el 29 de abril de 1727.
El Día Internacional de la Danza es una buena excusa para reunir a todos los géneros dancísticos para celebrar esta manifestación artística y su universalidad, remontando todas las barreras y uniendo al mundo en aras de la paz y la amistad con un lenguaje común.
Carla Segovia, baile con sabor a Tampico y a mar
Tampico es cuna de grandes talentos, ha visto nacer a actores, pintores, fotógrafos, escultores y la danza, la danza también tiene representantes y Carla Segovia Flores, es un claro ejemplo de trabajo, constancia y disciplina.
El día de hoy celebrando esta fecha Carla nos comparte un poco de su experiencia a través de una entrevista que realizó EL SOL DE TAMPICO.
¿Cómo te describes en el plano artístico?
R: La primera es una pregunta difícil, definirme concretamente, en cualquier aspecto de mi vida, siempre me ha parecido complejo. Soy una persona disciplinada, una persona que procura siempre mantenerse honesta a sus discursos y a sus posturas artísticas. Me gusta mucho probar distintas cosas, soy una persona que danza mucho, que se mueve mucho, todos los días, la mayoría del tiempo, me reto a encontrar al menos una nueva cosa en cuanto a mi manera de bailar. Me gusta retarme, también, siendo intérprete o colaboradora de otros proyectos que buscan estéticas, planteamientos y lenguajes de movimiento muy distintos a los que yo sola puedo llegar. Para mí, es divertido pensarme como una persona que se desarrolla en el arte de maneras muy distintas y al mismo tiempo no pierde su sello. Me gusta aprender de todo y sumar a lo que hago de manera personal. El arte me ha envuelto desde que soy pequeña y hasta el fin de mi vida así será.
¿Cómo nació tu interés por la danza?
R: Mi interés por la danza creo que siempre estuvo ahí, aunque yo no me diera cuenta cuando tenía 5 o 6 años, tal vez. Pero siempre me he movido sin parar. Mi madre y mis hermanas no siempre se percataban de eso, pero nunca he podido estar sin moverme. Pensé que sería músico de profesión, como mi mamá, pero a los 13 años, en un espacio escondido en Extensión Universitaria de la UAT, con el piso menos óptimo para bailar y con columnas que nos estorbaban en medio del salón, conocí (o reconocí) por primera vez ese algo en el que yo podía desenvolverme y ser genuinamente yo. De inmediato lo supe.
¿Que representa para ti llevar a Tampico y sobre todo a México a tantos lugares a través de la danza?
R: Para mí, ser de Tampico define mucho de lo que soy. Ese clima, esas calles, ese cielo. La música, los sabores, todo está en mí. Llevo en la piel siempre la sensación de agua, recuerdo todo esto como un hogar, como mi raíz. Ser mexicana para mí es un orgullo. Sé que soy afortunada por poder conocer diferentes lugares de nuestro inmenso mundo gracias a lo que hago, a las decisiones que he tomado, a la disciplina que he abrazado y por la que me he esforzado siempre. Que gente de otros países pueda mencionar a Tampico cuando me menciona a mí, es una alegría indescriptible. Estoy siempre agradecida con mi tierra.
En tu percepción, ¿cÓmo se encuentra la danza en la ciudad?
En Tampico hay excelentes bailarines, conozco a muchos y me siento contenta de llamarlos colegas y amigos, y a otros aún no he tenido el gusto. Sin embargo, siempre he sabido del enorme talento que hay en nuestra ciudad, en diferentes disciplinas dancísticas. Admiro mucho a mis compañeros de danza contemporánea, de Jazz, de danzas urbanas, de ritmos latinos, de danza clásica, de danzas orientales, de danza terapia, de danza deportiva y muchos más. Agradezco mucho la disposición que han tenido en los eventos en los que yo he solicitado su apoyo y admiro su tenacidad por mantener la danza a flote siempre, cada quien desde su trinchera, es una labor importantísima.
Actualmente, ¿estás trabajando en algún proyecto?
Soy becaria del Programa de Creadores Escénicos del FONCA,desde hace 4 años trabajo con toda mi alegría y dedicación con el Colectivo Querido Venado, aquí en la Ciudad de México. En Tampico trabajo en un proyecto en el que ponemos todo el corazón, mis compañeros Fernando Leija, Alejandro Chávez y yo, llamado 44 grados: Encuentro de Danza Emergente, con el cual llevamos dos ediciones, recibiendo apoyo de muchísima gente y una audiencia maravillosa. Cada vez sumo a mis proyectos personales y sigo trabajando.
Para concluir, se le preguntó si admiraba a tres bailarines a lo que comentó “No quisiera nombrar específicamente a tres bailarines, admiro a muchísimos y cada vez voy sumando. Me gusta mucho formar parte de esta generación y aprender de las anteriores. Me emociona ver a los que vienen con nuevas propuestas. Es increíble ver tanto en un universo que a veces parece tan pequeño pero tan emocionante como lo es la danza”, finalizó.