Siendo el dibujo una forma de comunicarse en su niñez, hoy en día el artista visual Gustavo Zamarripa Garza se ha convertido en un gran artista, reconocido por su trabajo y la labor de llevar un pedacito de su querido Tampico, su abuela Lilia Gutiérrez y su México a todas partes.
Egresado de la Licenciatura en Educación Artística de Escuela Superior de Arte de Yucatán, el también tallerista comparte una interesante charla con EL SOL DE TAMPICO y desde Mérida detalla qué es el arte para él, su inspiración, sus proyectos y un mensaje a las nuevas generaciones.
¿Quién es Gustavo?
Soy un productor visual muy inquieto, pero introspectivo, me gusta aprender siempre algo nuevo y tratar de compartir lo aprendido. Alguien que se pone retos y trata de lograrlos, aunque haya que intentar varias veces. Que comete errores y algunos aciertos.
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¿Cómo fue su niñez?
Algo solitaria los primeros, mientras fui hijo único y era muy tímido, se me complicaba mucho sociabilizar con extraños, se me facilitaba más comunicarme con el dibujo. Crecí en un ambiente rígido o sobre protector y eso me hacía inseguro. Me refugiaba en mis garabatos por horas. Solía rayar las paredes de la casa, me gustaba copiar los dibujos animados y los hacía con plastilina también.
¿Cómo nace su amor por la pintura?
Por mi abuela paterna Lilia Gutiérrez que fue pintora y cuando la visitaba en ocasiones estaba dando clases y me quedaba esperando viendo el trabajo de sus alumnos y otras veces ella estaba pintando, le hacía muchas preguntas, durante las vacaciones tomaba clase con ella y me platicaba de la vida de pintores famosos, lo cual despertó mi interés desde niño y desde entonces pensaba en dedicarme al arte y más grande cuando estudiaba arquitectura retomé clase de dibujo. Recuerdo de lo primero que me enseñó fue a lavar los pinceles.
¿Qué le inspira?
Aunque mi obra es abstracta, me motiva la naturaleza, así como los viajes, aprender de otras culturas, estudiar la obra de ciertos artistas, convivir y compartir con colegas, me nutro mucho de otras disciplinas como la poesía, música, cine, danza y también de las noticias, hay hechos a los que no podemos estar ajenos, como la desigualdad social, violencia en nuestro país o violencia a la mujer.
¿Qué personas han sido importantes en su desarrollo artístico (maestros, familia, alumnos)?
Mi familia, en especial mis abuelas me motivaron y apoyaron en diferentes formas. Mi madre Juana María Garza siempre ha estado presente y es mi ejemplo de tenacidad. Caín Valdez y José Luis Díaz de Galería Projectart, ahí inicié y aprendí mucho, no solo de arte, me guiaron en este camino, su apoyo ha sido invaluable y determinante ahora que estoy fuera de Tampico, han forjado grandes talentos y apoyado muchos jóvenes de la región.
El confinamiento social para los artistas fue un tiempo para crear, ¿qué representó para Gustavo?
Fue una sacudida inesperada, un tiempo para reinventarse, actualizarse, aprender nuevas cosas para seguir teniendo presencia en el mercado, aún en esta crisis económica y sanitaria, ya que las exposiciones se cancelaron o pospusieron y eso generó frustración e incertidumbre. En mi caso hubo un bloqueo temporal, preocupación por la salud, insomnio, ansiedad, pero después aproveché el encierro para producir mucho y buscar otras opciones para exponer o vender obra, como las redes sociales, revisar convocatorias y fue la oportunidad idónea para tomar algunos Diplomados o cursos virtuales que antes hubieran sido imposible cursar, ya que fueron en otras ciudades.
¿De las piezas creadas cuál considera ha marcado su vida y como la describiría?
Sería “Tornado de impotencia” que fue la pieza con la que gané en el año 2000 el Concurso Regional de Pintura “Ramón García Zurita”, fue mi primer premio y fue determinante para dedicarme al arte a partir de ahí a la fecha, poco después dejé la carrera de arquitectura. Es un autorretrato donde un personaje va cayendo a un vació en medio de un tornado, es abstracto en blanco y negro.
¿Qué significa para usted representar a México en exposiciones internacionales?
Es un orgullo que me tomen en cuenta para mostrar mi arte, es complicado y más produciendo desde provincia, es un reto, ya que hay que reunir ciertos criterios en tiempo, cumplir un estándar, y no hay quien meta las manos por ti, si no cumples con eso. Me da satisfacción que vean y se den cuenta de que en Tamaulipas y México, hay gente trabajadora y creativa, tratar de cambiar un poco la percepción negativa que aún existe. Hace algunos años tuve la oportunidad de exponer en España y Francia y este año expuse en Perú y Honduras en una muestra sobre el Bicentenario de América, donde coincidí con artistas de Iberoamérica y el próximo mes de septiembre será mi primera exposición en Estados Unidos, después de dos intentos frustrados, surgió la invitación a participar en la muestra binacional multidisciplinaria “Donde mueren los sueños” donde la temática es la migración y su problemática, un tema muy sensible siendo frontera, será presentada en la galería Hill top gallery de Nogales, Arizona, EE. UU., donde espero sea bien recibida las obras que realicé exprofeso, son 6 obras abstractas de mediano y gran formato sobre papel, donde empleé el collage, tinta y usé tickets térmicos intervenidos con calor que recolecté de cajeros automáticos y de las compras del súper, esto como una crítica al consumo voraz y al capitalismo, la serie la llamé “Radiografías del Capitalismo”, afortunadamente a raíz de este proyecto ha surgido invitación a otro el próximo año.
¿Trabaja en algún proyecto?
Actualmente participo en la muestra “Mil artistas Visuales de México”, la cual continúa su itinerancia por varias ciudades del país. Estoy por terminar el Diplomado en profesionalización de la práctica artística que imparte el IVEC de manera virtual. También trabajo en nueva obra de mayor formato para una futura exposición individual y sigo buscando nuevos foros para exponer en el país, donde no haya expuesto y la idea es continuar teniendo presencia en el extranjero.
¿Podría dedicarle un mensaje a las personas interesadas en el arte?
Primero a los padres, les diría que apoyen a sus hijos actualmente en la zona hay varias opciones de educación artística no formal, algunas gratis o muy accesibles. Si estos manifiestan interés en alguna rama artística, aunque no se dediquen a eso en un futuro, será una experiencia que nutrirá sus vidas. A los jóvenes, les diría que lo intenten, si creen que es lo suyo, no se queden con esa espinita, no es una carrera fácil, como muchas otras. Prepárense, busquen talleres, váyanse de aprendices, los que puedan estudiar fuera, adelante, hay muchas becas, hasta en el extranjero. Aprendan algún oficio del que puedan vivir, mientras se posicionan. Aprendan otros idiomas, les abrirán muchas oportunidades, hagan una red de contactos y cuando sientan que ya son exitosos, salgan de esa zona de confort y busquen nuevos retos, nunca se termina de aprender.
