Con el reciente fallecimiento de la reina Isabel II, las anécdotas y mitos que rodean la corona inglesa empiezan a cobrar vida nuevamente, tal es el caso de que alguna vez fue llamada bajo el apodo de “Lilibet”, al que rodea una tierna historia familiar.
Felipe de Edimburgo fue de las últimas personas en llamar a su majestad con este apodo y es que cabe hacer mención que este mismo solo lo utilizan personas muy cercanas e intimas de la familia, ya que además fue la propia reina quien se puso ese apodo.
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Isabel II no podía decir su nombre cuando aún era una princesa
“Lilibet” no es el diminutivo de “Elizabeth” ni era similar a “Isabel”, pero en su momento la pequeña princesa no podía pronunciar su propio nombre de manera correcta.
Hay que hacer hincapié que el acento británico cuenta con una pronunciación un tanto diferente y al decir su nombre lo decía como “Lilibeth”.
Dicho evento generó una broma familiar de los Windsor desde hace un siglo. Adoptada por sus padres, el rey Jorge VI y la reina madre, Isabel Bowes-Lyons y también sus abuelos, Jorge V y María de Teck, quienes se enternecieron ante la gracia de la pequeña y comenzaron a llamarla por ese apodo.
Así se creó este particular apodo para la reina que fue adoptado por familia y personal de la realeza, incluso con el fallecimiento de su esposo Felipe de Edimburgo, los reyes de España Felipe y Letizia mandaron un telegrama encabeza con un “Querida tía Lilibet”.
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Harry y Meghan homenajean el apodo de la reina Isabel II al nombrar a su hija
El 4 de junio de este 2022, se volvería a escuchar y recordar esta anécdota en la familia real cuando su nieto Harry y su esposa Meghan dieran este nombre a su hija “Lilibet”, Lili Diana Mountbatten-Windsor.
Y aunque tras su nacimiento se especuló sobre un aparente reclamo por parte de la familia por el nombre, esto no resultó ser más que un mero chisme, siendo los mismos padres quienes confirmaron que la reina no tuvo problema alguno con el tema.
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Tras el fallecimiento de una de las figuras más emblemáticas de la corona británica, se puede olvidar que entre todos los títulos de nobleza, protocolos y formalidades, hay una familia con amor y anécdotas: como el hecho de que la reina Isabel II con cariño será recordada por sus seres queridos como “Lilibet”.
