En 1856, se redacta la Constitución de 1857, la cual aboga por la separación de tres poderes y la conformación de una República. En su creación forma parte el diputado liberal Manuel Romero Rubio. En 1881, 24 años más tarde, Romero se convierte en el suegro del General Porfirio Díaz, en ese momento, dictador de México. Esta es la historia.
¿Quién fue Manuel Romero Rubio?
Manuel Romero Rubio fue un abogado mexicano nacido en la ciudad de México en 1828. Fue miembro del Congreso Constituyente de 1856, el cual redactó la Constitución de 1857. Ocupó el puesto de diputado como resultado de su labor previa como juez de Tulancingo y secretario de la Suprema Corte de Justicia.
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De acuerdo a la Universidad Popular Morelense, Romero era un hombre de tendencias liberales. El abogado apoyó la Revolución de Ayutla, en 1854, en contra del sistema dictatorial de Antonio López de Santa Anna. En 1858, permaneció en el bando progresista en la Guerra de Reforma.
Formo parte del gobierno juarista, primero como representante de Veracruz y después como diputado federal durante la Segunda intervención francesa en México.
En 1872, Sebastián Lerdo de Tejada es nombrado presidente de la República en elecciones extraordinarias, suscitadas por la enfermedad y muerte de Benito Juárez. La presidencia de Tejada, acorde a los registros de la Secretaría de la Defensa Nacional, se caracterizó por continuos levantamientos en su contra.
En 1876, Lerdo de Tejada busca la prolongación de su mandato. El 10 de enero, Porfirio Díaz se levanta en armas en Tuxtepec, Oaxaca, bajo el lema: “Sufragio efectivo, no reelección”. El 31 de agosto, con el país en medio de conflictos armados y un panorama político ambivalente, Tejada nombra secretario de Relaciones Exteriores a Manuel Romero Rubio.
El 18 de noviembre de 1876, la presidencia de Lerdo de Tejada es insostenible. Romero Rubio huye rumbo a Panamá y después a Estados Unidos.
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La unión con Porfirio Díaz
La disertación “Manuel Romero Rubio y la construcción del poder político durante el Porfiriato, 1884-1895” de Fausta Gantus, expone como el 14 de junio de 1878, Romero regresa al país diciendo que lamenta profundamente su asociación con Lerdo de Tejada, quién, en sus palabras, “condujo a la nación a un caos”.
En ese momento, Romero Rubio comienza a congraciarse con el nuevo presidente de la República. Díaz acepta sus avances políticos y, en 1880, lo nombra senador por el estado de Tabasco. En 1881, Romero se convierte en el suegro de Porfirio Díaz, cuando este se casa con su hija, Carmen Romero Rubio y Castelló.
Al momento del matrimonio, la novia tiene 17 años; el novio, 51 años; y el suegro, 53 años. Tres años después del inicio de la relación familiar, en diciembre de 1884, Romero es designado secretario de Gobernación del Porfiriato. Cargo que va a ocupar hasta el 03 de octubre de 1895, momento de su muerte.
El 25 de mayo de 1911, Porfirio Díaz renuncia a la presidencia y el 31 de mayo parte rumbo a Francia, en un autoexilio. En el viaje lo acompaña su esposa, Carmen Romero Rubio y Castelló, hija de Manuel Romero Rubio. El hombre liberal, diputado del Congreso Constituyente de 1856, quien terminó sus días como amigo, secretario, consejero y suegro de un dictador.