Dicen que nadie es profeta en su tierra. Es cierto que María Griselda Orta Guzmán, nacida en Tampico, Tamaulipas un 8 de enero, ha desarrollado toda su trayectoria en las artes marciales fuera el puerto jaibo, pero su constancia y entrega le ha permitido brillar con luz propia al grado de haberse convertido en la primera mujer campeona de la modalidad de formas en el Torneo Nacional de Karate, celebrado en 1975, un logro entre muchos que le permitió ser inducida en el Salón de la Fama del Deporte de Tijuana, Baja California, lugar donde actualmente radica con su esposo, Rigoberto López Vazquez, fundador del sistema de pelea Kung Do Lama.
“Yo no empecé mi carrera de artes marciales muy pequeña como hoy se hace con los niños, yo la empece a los 21 años porque me case con un maestro de artes marciales, el Master Rigoberto López Vázquez, y me gustó, me apasionó el estilo que el practicaba y con gran sorpresa vi que se me daba la técnica y empecé a competir, en Estados Unidos primeramente”.
“En 1975 competí en el gimnasio Juan de la Barrera, cuando se le dio la oportunidad a la mujer, yo gané el primer lugar, convirtiéndome en la primera mujer campeona de artes marciales a nivel nacional, ya en 1976 participe en Guatemalas, con bastantes cinturones negros y gané el primer lugar, luego me gustó transmitir mis conocimientos a niños para poderlos formar y esto me apasiona, tengo más de 40 años entrenando y mi esposo más de 50 años”, recuerda, señalando que todos estos logros le han permitido ingresar al Salón de la Fama de Tijuana, junto a su esposo e hija.
“Con mucho orgullo soy de Tampico, y me llama la atención que dicen que 'nadie es profeta en su tierra', yo estoy en el Salón de la Fama del Deporte de Tijuana, Baja California, somos conocidos en el ámbito del arte marcial y no se me hace mala idea ser propuesta para el Salón de la Fama aquí en Tampico y en Tamaulipas”, expresa. “Claro que me gustaría estar en el Salón de la Fama aquí en Tampico”, asegura.