A pesar de la desecación que se tuvo en varias de los cuerpos de agua del sistema lagunario del Tamesí-Chairel, la plaga del pez diablo persiste y de acuerdo a lo reportado por pescadores de esta cuenca no se ha tenido llegada masiva de otras especies, por arrasar este animal con los peces nativos del acuífero.
El representante de la cooperativa del Mayorazgo, una comunidad que se ubica en los límites de Tamaulipas y Veracruz, por el río Tamesí, Amado Ruiz, menciona que a pesar de que el sistema lagunario tiene ya un rebase en su capacidad, aún no regresan las especies y solo se pesca pez diablo, lo que está afectado a poco más de 500 trabajadores del mar.
Añade que en las 8 horas que pasan pescando, solo pueden sacar pocos kilos de "guapota", "guabina" o "tilapia" que son los productos nativos del sistema lagunario que abarca varias comunidades de Altamira y norte de Pánuco, por lo que la plaga del pez diablo afecta a por lo menos dos mil familias que se dedican a la pesca en esa parte del Tamesí.
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Menciona que esperaban que volvieran las especies que se fueron cuando los espejos de agua desaparecieron de varias partes del Tamesí, sin embargo, "solo el pez diablo a regresado y ahora ha crecido como en el 2015, cuando por cada kilo de otra especie, sacaban 5 o 6 de este tipo de pescado, lo que representa una perdida económica.''
Por separado Francisco Pérez, representante de pescadores en la colonia Morelos de Tampico, mencionó que al tirar las redes se vienen entre 12 y 15 kilos de pez diablo sobre todo en la parte sur del sistema lagunario que conforman la laguna de la herradura y la escondida pertenecientes a este municipio.
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Menciona que esto representa un duro golpe a la economía de los pescadores, ya que a pesar de que ahora existe más agua, las especies no han podido llegar debido a la plaga de pez diablo que ha regresado al sistema lagunario del Tamesí-Chairel.