Una lamentable noticia es la muerte de “Toto”, el único y famoso orangután del zoológico de Chapultepec, falleció la tarde del miércoles 8 de diciembre, información proporcionada por la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema), pero ¿quién era este peludito?

Tenía 29 años y 11 meses de edad, nació el 25 de diciembre de 1991, fue embajador de la conservación de la vida silvestre, y durante casi tres décadas apoyo los esfuerzos para la conservación de especies amenazadas, o bien, en peligro de extinción.

SUS PAPÁS ERAN HÍBRIDOS

Vivió toda su vida en el bosque tropical del zoológico, “Lisa” y “Woody” fueron sus padres, dos orangutanes híbridos, quienes procedían de madres de la especie de orangután de la isla de Borneo y padres de la especie de la isla de Sumatra.

“Toto” fue muy querido, y criado artificialmente con un biberón, ya que su mamá no producía leche para poder amamantar a sus crías, gracias a esto, el orangután tuvo una conexión directa con los humanos hasta los siete años.

Su aprendizaje, el reconocimiento de su entorno, así como sus experiencias dio como resultado a lo que se conoce como “improntación” con el ser humano y no con su propia especie, un gran acercamiento entre él, sus cuidadores y veterinarios.

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Vivía en un recinto recientemente remodelado, tenía tres espacios diferentes para escoger, un albergue naturalístico, un jardín y una casa de día, este último sitio fue usado por él en muchas ocasiones, ya que se refugiaba cuando el clima no era el indicado para estar en la intemperie en los otros dos lugares.

Biólogos, médicos veterinarios, cuidadores y todo el personal del zoológico han lamentado la noticia de su muerte y convocaron a todos a rendirle un homenaje a “Toto” con fotografías, mensajes o videos a través de las redes sociales. Es importante mencionar que los orangutanes tienen un promedio de vida de 30 a 45 años.