Una ola de cangrejos rojos invade las calles de Australia, ¿podría pasar en el sur de Tamaulipas?

Se trata de un espectáculo que tiene fascinados a amantes de la naturaleza de todo el mundo

Roberto González | El Sol de Tampico

  · miércoles 17 de noviembre de 2021

Cada año, en la Isla de Navidad, alrededor de 50 millones de cangrejos rojos emergen del bosque y se dirigen al océano para reproducirse | Cortesía: Instagram @parksaustralia

En Tampico tenemos la jaiba azul, pero en Australia es roja y hay a montones, en especial durante esta temporada del año, cuando se produce la migración masiva de este crustáceo en uno de los espectáculos naturales más increíbles del mundo.

BUSCAN REPRODUCIRSE Y DESOVAR

Cada año, en la Isla de Navidad, alrededor de 50 millones de cangrejos rojos emergen del bosque y se dirigen al océano para reproducirse, tomando así carreteras, arroyos, rocas y playas de la zona. Su desplazamiento comienza con las primeras lluvias de octubre o noviembre, según se informa en el sitio web de parques nacionales del gobierno australiano.

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Los cangrejos rojos de toda la isla abandonan sus hogares y comienzan a andar hacia el océano para aparearse y desovar. Los cangrejos machos lideran la migración y se les unen las hembras en el camino.

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Esta migración está estrechamente relacionada con el ciclo lunar. Los cangrejos rojos siempre desovan antes del amanecer en una marea alta en retroceso durante el último cuarto de la luna. Increíblemente, saben cuándo salir de sus madrigueras para realizar este encuentro. Cada cangrejo hembra puede producir hasta 100 mil huevos.

La migración del cangrejo rojo es la mayor atracción turística de la Isla de Navidad y atrae a amantes de la naturaleza de todo el mundo. Con el fin de proteger a esta avalancha de crustáceos rojos, en el lugar se colocan plataformas para que la gente transite sin problemas, a la vez que puede contemplar a esta fauna marina.

¿PODRÍA PASAR ALGO ASÍ EN NUESTRA ZONA?

En nuestro puerto aunque la jaiba azul es icónica, lo cierto es que ha disminuido drásticamente desde hace tiempo, a consecuencia de la pesca furtiva y la ausencia de vedas. Unos cinco años atrás, las cosechas del crustáceo superaban las dos mil toneladas anuales, actualmente apenas alcanza las 300 toneladas.

Incluso especialistas han afirmado que podría producirse una extinción de este ejemplar de no tomarse las medidas de conservación debidas.