90 años de la Casa de la Naturaleza

Corría el año de 1929, el auge petrolero convertía al Puerto de Tampico en una de las ciudades más importantes del país cuando, luego de casi tres años de espera, la sociedad fue testigo de la inauguración de la Planta Potalibilizadora Hidros.

Desde entonces llamó la atención por la peculiaridad con la que fue construida por la empresa Structor S.A., al ser consolidado sobre una especie de península alargada con una pequeña conexión a tierra denominada “Isleta de los Naranjos”, rodeada por las aguas de la laguna de La Vega Escondida.

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La edificación, que de inicio abastecía de agua a Tampico, celebra este 2019 sus primeros 90 años y es considerado “Patrimonio Cultural y Ambiental del Sur de Tamaulipas”, por su historia y gran aporte a los tampiqueños desde su concepción.

SU CONSTRUCCIÓN

La Planta Hidros fue construida en el estilo Art Deco, con azulejos color amarillo y azul, simbolo de la importancia del agua para la ciudad, tanto geográfica como históricamente.

La fachada del recinto cuenta con una especie de frontones curvilíneos que dotaban al complejo de una estética muy particular; ventanas de ojo de buey, falsas ménsulas y columnas decoradas con azulejos. Al interior se colocaron cerramientos de herrería artística en puertas y ventanas, grabando en las puertas el logotipo de la empresa.

El edificio, construido hace 90 años, renació en el año 2006 con el propósito de generar un espacio donde se le de valor al cuidado ambiental, recibiendo el nombre de Casa de la Naturaleza.

FUNCIÓN EN EL TAMPICO MODERNO

En su inicio la nueva planta captaba sus aguas del río Tamesí; Hidros S.A., había solicitado un aumento de extracción, concesión que le fue otorgada por el ayuntamiento.

En 1927 las aguas eran derivadas a un sistema de tanques concatenados de sedimentación, de cloración y de ultración para la potabilización del agua.

El trayecto del agua se iniciaba con su trasvase a dos tanques de sedimentación que contaban en su parte central con un canal o aforador Parshall para medir la cantidad de flujo de los mismos.

Pasaban posteriormente, a cuatro piscinas de filtraje y cloración donde se usó un sistema de Ultraje denominado “Clímax”, que había sido patentado el 7 de septiembre de1928 por Thomas Braniff.

Consistía en una “cama de tuberías” con pequeñas perforaciones longitudinales que depositadas en el fondo de las piscinas de filtraje para separar los elementos residuales del agua, contaron con una camas de grava extraídas del cercano río Guayalejo, también allí recibían el tratamiento de cloración para que el agua fuese apta para el consumo humano.

Se construyó un laboratorio de análisis del líquido en un pequeño pabellón situado entre los tanques de sedimentación y las piscinas de filtraje, en este lugar se realizaban los análisis correspondientes al agua que se recibía y al agua tratada.

Finalizaba el proceso con la caída del agua a unas tuberías para ser impulsada por unas bombas de la marca Diessel, traídas desde Alemania, estas máquinas tenían el cometido de impulsar el vital líquido a la red de tuberías y a los depósitos de distribución que la empresa también construyó y que llega a distintos punto de Ciudad Madero y de Tampico.

NACE LA CASA DE LA NATURALEZA

Ante la inquietud de reactivar y darle vida al espacio que guarda historia y antecedentes históricos de la ciudad en 2006 diversos sectores de la sociedad tampiqueña se unieron para darle vida a lo que hoy se conoce como Casa de la Naturaleza.

El proyecto buscaba aprovechar las 19.5 hectáreas que rodean el espacio, el cual consiste en la restauración del edificio, creación de parques recreativos, actividades que promuevan la preservación y conservación de la flora y fauna que lo rodean y forman parte del sistema lagunario.

El director del espacio, José Luis de León Hurtado, explicó que ha sido un proceso lento en el que se ha avanzado de manera satisfactoria, gracias al apoyo de las diversas administraciones el espacio poco a poco ha tomado vida y se consolida como un lugar para la recreación, esparcimiento y estudio ya que ahí se concentra una sede de la Universidad Tecnológica del Mar.

“Hemos logrado importantes avances, se realizan estudios, se reciben visitas, se expone arte y muchas actividades más que han permitido que la sociedad tenga conocimiento del espacio, el cual está rodeado de nuestro sistema lagunario y que posee una belleza única”, explicó.

En fechas recientes se logró la reactivación del Centro Acuícola Tancol, con la liberación de alevines y con la operación de altos rendimientos tecnológicos a base de membranas plásticas, en los estanques sedimentadores de la antigua Planta Hidros donde serán producidas crías de especies pesqueras típicas, para repoblar ríos y sistemas lagunas de la región.

“Esta actividad se realizó dentro de la celebración del 90 Aniversario de la explanta potabilizadora Hidros, se liberaron 50 mil crías de tilapia mojarras en el frente de agua de la Casa de la Naturaleza, los asistentes tuvieron la oportunidad de ser parte de este contacto con la naturaleza”, explicó el entrevistado.

DE 7 A 7

La Casa de la Naturaleza permanece abierta todos los días de 7:00 de la mañana a 7:00 de la tarde para el deleite de todas las familias de la zona e incluso de fuera de la región.

Los espacios naturales de este recinto es escenario preferido de fotógrafos para sesiones familiares, de cumpleaños o bodas.

Actualmente se exhibe la muestra fotográfica “Todos somos naturaleza” y los visitantes pueden disfrutar de diversas actividades al aire libre.

MISSION NATURE

El grupo de fotografía de naturaleza para la educación ambiental Mission Nature está integrado por un grupo multidisciplinario de personas, cuyo común denominador es el Amor por la naturaleza.

Cada uno de sus integrantes usa sus diferentes áreas de acción para darle valor al objetivo principal del organismo.

Mission Nature, fundado por Ernesto Rivera Calderón y Martín Sánchez, han sido impulsores de la Casa de la Naturaleza, y es que ellos a través de la fotografía han buscado llevar dar a conocer todas las especíes que rodean el recinto.

“Nosotros buscamos generar conciencia con imágenes de alto impacto e historias que inspiren un cambio en la cultura ambiental , que promuevan el amor y el cuidado del entorno natural donde convivimos y la Casa de la Naturaleza representa un lugar muy importante para la vegetación de la ciudad”, explicó Martín Sánchez.