Las secuelas económicas de la pandemia de coronavirus tienen un mayor peso en las mujeres que en los hombres, pues representan el 55% de los despidos y el 30% de las empresas micro y pequeños negocios que quebraron en el sur de Tamaulipas, afirmó la Asociación Mexicana de Mujeres Jefas de Empresa en este puerto (AMMJE).
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La presidenta de ese organismo, Martha Llanes López, agregó que esas condiciones adversas incrementaron la informalidad y son miles de emprendedoras que comercializan alimentos, ropa, zapatos, bordados, tejidos y otros muchos productos a través de redes sociales para mantener el equilibrio económico en casa, porque los apoyos gubernamentales son pocos y pequeños.
“Muchas empresas que el año pasado hicieron reajuste de personal prefirieron liquidar a las mujeres que a los padres de familia, obligándolas a un mayor esfuerzo laboral desde casa para tener ingresos suficientes para el sustento de sus hijos. La pandemia empeoró el contexto para la población femenina, porque incrementó el maltrato doméstico y el número de divorcios, obligando a que muchas estén buscando empleo”, agregó.