El símbolo de Tampico y la región, está brillando por su ausencia en los mercados de la zona, la jaiba azul ha disminuido su presencia en la región desde hace varios meses, de acuerdo con pescadores y distribuidores de productos marinos.
A la par, la carestía también contribuye a que sea un producto que esté fuera de la economía familiar dado que su precio es elevado, de acuerdo con la información proporcionada.
SE TRATA DE UN EVENTO CÍCLICO, ¿QUÉ LO ORIGINA?
Las bajas temperaturas que se han registrado en la zona se convierten en un factor para que la jaiba se ausente ya que naturalmente se esconde en el fondo del río o laguna lo que complica que pueda ser capturada.
Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí
Antonio Gutiérrez, concesionario distribuidor señaló que este fenómeno es cíclico dado que al entrar el otoño y el invierno el crustáceo busca refugio en el lodo profundo.
“Cada año se presenta esta situación, se registra una menor presencia de la jaiba, se puede pescar pero requiere tiempo y costo por lo que a veces resulta inconveniente”, señaló.
INCREMENTAN PRECIOS EN LA JAIBA Y MARISCOS
Sobre ello dijo que la ausencia de la jaiba en esta temporada presiona los precios al consumidor explicando que la pulpa desmenuzada ha alcanzado más trescientos pesos por kilo.
Expuso que al tratarse de un producto con demanda pero a la vez con escasez en la actual temporada, su cotización la coloca fuera del bolsillo del consumidor.
Sobre ello, señaló que el promedio de producción se ha logrado a niveles importantes en la zona, explicando que se ha alcanzado a comercializar más de tres mil toneladas.
EVITAR LA SOBREEXPLOTACIÓN
Por su parte, el biólogo Sergio García Sandoval señaló que la jaiba está en condición vulnerable por lo que se requiere de acciones para ayudar a su conservación.
Expuso que si bien la temporada invernal ayuda a una disminución de su captura en la región, es importante evitar la sobreexplotación de la especie sobre todo en los meses de abundancia.
Añadió que es importante cuidar su hábitat y evitar a toda costa dañar el medio ambiente con el fin de que el crustáceo encuentre las condiciones óptimas para su reproducción.