El Gobierno Municipal de Tampico evaluará en los siguientes 10 días las alternativas de reubicación de comerciantes ambulantes del centro de la ciudad, pues la permanencia de medio centenar de ellos en un tramo de la calle César López de Lara ya provocó conflictos con los negocios establecidos.

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José Vélez Cicero, Jefe de Inspectores del Comercio en Vía Pública, señaló que se tiene conocimiento de la inconformidad de casi 5 vendedores ambulantes que permanecen en la calle López de Lara, entre Carranza y Madero, quienes hace dos meses fueron retirados de ese sitio atendiendo recomendaciones de la Secretaría de Salud, cuando iniciaba la contingencia sanitaria.

Los oferentes se rehúsan a ser reubicados de ese sitio, pese a que el comercio organizado ya presentó quejas formales y ha pedido que se respete la Ley de Ingresos del Municipio, lo que implica retirarlos de ese sitio y ofrecerles otras alternativas.

"Son como 50 gentes que se acomodaron a 25 por cada cuadra, entre Madero y Altamira que son alrededor de 4 cuadras, son un promedio de 5 ambulantes por cuadra. A ellos les pedimos varias cosas, entre ellas que no pongan sombrillas para no dañar tanto la imagen de la Zona Cero, y ya los empresarios establecidos quieren hablar con nosotros. Estamos a prueba 10 días, vamos a ver y si hay quejas o no hay quejas, si mantienen el reglamento, si pagan o no pagan, todo lo voy a analizar y voy a entregar el resultado a mi jefe, el presidente municipal y en base a eso voy a tomar una decisión", señaló.

Comentó que cuando se autorizó la reapertura de establecimientos de giros no esenciales, entre ellos los puestos semifijos, se estableció que deberían cumplir con las medidas sanitarias que ha dispuesto la Secretaría de Salud, como el uso de cubrebocas al personal que atiende esos negocios, el gel antibacterial y el lavado constante de manos, pero la mayoría de los vendedores ambulantes no cumple con ello.

"Los ambulantes no entienden razones, yo sé que estamos pasando por una situación difícil no se les niega que venden afuera de su casa, mientras que se pongan a vender y cumplan con las medidas sanitarias”, apuntó.

Vélez Cicero subrayó que además de los vendedores informales, los dueños de negocios establecidos se molestan porque los primeros bloquean sus accesos o colocan objetos que obstaculizan la vista de los aparadores, por lo que se ha buscado también conciliar los conflictos entre ellos.