En Tampico apenas 65 menores con capacidades diferentes se han inscrito en las escuelas integradoras, es decir, en planteles que tienen un programa educativo regular y no especial para personas en estas condiciones, debido a que las instituciones en muchos de los casos no cuentan con el recurso humano y físico.

Margarita Almazán Sifuentes, jefa de la Supervisión 6 de Educación Especial, dijo que la mayoría de los estudiantes que se atienden son “con diferentes capacidades que van desde el autismo o algún problema sicomotor y también a quienes tienen alguna problemática educativa pasajera”.

Añadió que en los Centros de Atención Múltiple (CAM) que existen en Tampico y en Madero, que es la competencia de la zona 6 de educación especial, se tienen 275 alumnos, que presentan una discapacidad más delicada y que requieren de mayor atención con un programa especial”.

“La inclusión ya ha avanzado mucho, muchos de los niños con una discapacidad están siendo aceptados en las escuelas regulares, aunque no existen aún muchos espacios para la integración de estudiantes con capacidades especiales, por lo que los planteles deben de tener un límite”, indicó.

Es cierto que la ley, expuso, “dice que todos los niños tienen derecho a integrarse, pero también los otros niños tienen sus derechos y las escuelas regulares cuentan con muchas limitaciones para aceptar alumnos y nosotros vamos integrando al que sí logra, al que sí puede y tienen todas las posibilidades con el apoyo de su familia”.

Agregó que “tratamos lo más que se puede de integrarlos, pero, bueno, hay veces que no porque la discapacidad es múltiple tienen muchos problemas personales o de conducta que no son aceptables en muchas escuelas regulares y se busca entonces darles en los Centros de Atención Múltiple una educación, pues en los CAM se acepta a todos los estudiantes con alguna discapacidad”.