Familiares de los cinco pescadores desaparecidos en altamar desde el pasado lunes, acudieron a las instalaciones de la Primera Región Naval de la Secretaría de Marina en Ciudad Madero, al sur de Tamaulipas, para pedir información sobre la situación del barco pesquero “Roque Rojas 1”.
Leonardo Casados, hermano de José del Carmen Barrera Martínez, capitán de la embarcación, señaló que ante la desesperación de no saber nada de sus familiares y que las autoridades no les informan nada, decidieron acudir a las instalaciones de la Marina.
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“Estamos aquí para ver si nos hace el favor el comandante de esta Región Naval, que nos dé informes acerca de lo que han hecho en la búsqueda de los tripulantes del barco”, indicó.
Reiteró que hasta el día de hoy no tienen ningún dato de ellos, sin embargo, mantienen la esperanza de que sean encontrados con vida, “el lunes se perdió la comunicación y ya no supimos nada más hasta este momento”.
Detalla que de acuerdo a lo que le han mencionado otros barcos que estaban en la misma zona que el “Roque Rojas 1” la embarcación, que zarpó desde hace más de un mes del puerto de Tampico se hundió.
“Por los otros barcos que andan allá afuera, me comuniqué ayer con ellos, dicen que se hundió, y ya no saben nada, porque la marejada estaba muy fuerte, el viento también”, externó.
Pescadores desaparecidas
- José del Carmen Barrera Martínez, capitán
- Domitilo García Obando, cocinero (de 64 años)
- Carlos Jesús Baquedano, motorista
- Miguel Ángel Pato, pacotillero
- Samuel García Lopez, guinchero (de 39 años)
Hermana del capitán tuvo un mal presentimiento
Por su parte Enriqueta Barrera Martínez detalló que la última comunicación que tuvo con su hermano fue el lunes por la mañana y señaló que gracias al clima que había, estaban teniendo una buena pesca.
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“El lunes 4 como a las ocho y media recibí su saludo de buenos días por WhatsApp. Me dijo casualmente que estaba buena la pesca”, indicó.
Le dijo que llegarían al puerto de Tampico a mediados de noviembre, pero la llamada lejos de tranquilizarla le generó angustia y durante el transcurso de la noche comenzó a tener un mal presentimiento.
“Yo amanecí muy triste, con dolor de cabeza, ganas de llorar, de todo pero yo no sabía por qué hasta en la tarde del miércoles que nos enteramos que las balsas del barco estaban a la deriva en el mar”, afirmó.
Mandos navales se comprometieron a mantenerlos informados
Las súplicas de los familiares hicieron eco en los mandos navales, saliendo uno de ellos para dialogar con ellos.
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“Vamos a dejar que pasen dos personas para platicar con ellos y darle la información que requieren”, aseveró el oficial.
Luego de unos 30 minutos, Leonardo Casados y una persona más, salieron de las instalaciones indicando que a partir de este momento tendrán información directa de la Primera Región Naval para evitar situaciones como la que se registró por la tarde en donde se aseguraba el recatar de los pescadores, lo que no fue verdad.
