La infraestructura hospitalaria en el sur de Tamaulipas afronta años de descuido del gobierno federal, castigando a su población con servicios de tercera en atención médica en el IMSS, ISSSTE y Secretaría de Salud.
Los poderes Ejecutivo y Legislativo han desoído la permanente demanda colectiva, de gastar suficiente en la ampliación del hospital IMSS Madero que se encuentra totalmente rebasado por la cifra de derechohabientes, terminar la construcción del hospital civil de Ciudad Madero, así como concluir el equipamiento y hacer operable del “Dr. Rodolfo Torre Cantú” en Altamira, o mejorar el ISSSTE, fustigó el dirigente empresarial Plácido de Lerma Ávila.
MEDIO SIGLO DE ABANDONO EN LA INFRAESTRUCTURA HOSPITALARIA
El presidente de la Asociación Regional de Comerciantes e Industriales Mexicanos (Arcim) precisó que desde hace casi medio siglo en la región no hay hospitales con capacidad suficiente y los trabajadores asegurados y sus familias de la zona huasteca de Tamaulipas, Veracruz, San Luis Potosí e Hidalgo reciben servicio de tercera o cuarta.
Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí
“Son muchos años de descuido, que han perjudicado a las clínicas y hospitales de la zona conurbada de Tampico, pero tampoco dotado de centros médicos públicos suficientes a esas regiones vecinas, cuyos pobladores sufren más que nunca por la pandemia, la falta de servicios y las crecientes carencias”, aseguró. En el caso del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) criticó que sí cobre a tiempo las cuotas obrero-patronales, ejerza mucha presión a los patrones cautivos, pero no regresa esos ingresos en el mejoramiento de las instituciones de salud, que se encuentran cada vez peores y rebasados por las exigencias por el coronavirus.
INCONCLUSOS LOS HOSPITALES DE LA SSA
Lamentó que el Poder Ejecutivo castigue permanentemente a estas regiones, ricas en recursos naturales, pero con presupuestos muy escasos para los hospitales de la Secretaría de Salud, en Tampico, Madero y Altamira, convertidas en receptoras de más de un millón de habitantes de la huasteca, obligados a buscar atención médica en nuestra zona.
El ejemplo de ese abandono es claro y ocurre con el edificio en construcción del Hospital Civil de Ciudad Madero, que permanece sin terminar desde hace varios años, por el escaso avance en su construcción y sin que haya fecha para concluirlo, manifestó.
Otro caso criticable es el hospital de Altamira “Dr. Rodolfo Torre Cantú”, inconcluso en equipamiento de oficinas, laboratorios y médico, y aunque fue habilitado como punto Covid, está muy lejos de estar listo para atender los requerimientos de la población, agregó.
A eso se añade que el ISSSTE de Tampico, el cual a más de un año que supuestamente fue el ganador de 20 millones de pesos de la rifa del avión presidencial, tampoco los ha recibido y sus trabajadores y derechohabientes padecen la falta de equipo médico, instalaciones deficientes y falta de suministros médicos básicos.