El 2020 fue un año crítico para el sector turismo en general, pero uno de los que más sufrieron pérdidas fue el turismo de reuniones que debido a la pandemia se vio suspendido a diferencia del turismo de sol y playa, que una vez abierta la playa Miramar en el sur de Tamaulipas pudo reactivarse.
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Y es que la realización de congresos, reuniones, ferias, exposiciones y viajes empresariales representaban uno de cada cinco cuartos-noche en los hoteles.
“El segmento de turismo de reuniones, si todo evoluciona favorablemente, puede recuperarse este año, hablamos no solo de congresos y convenciones, sino de eventos deportivos, culturales y todo lo que reúna a gente por algún motivo, a pesar de que ya están abiertos los salones al 20%”, mencionó Íñigo Fernández, presidente de la Asociación de Hoteles del Sur de Tamaulipas.
De acuerdo con datos del Consejo Mexicano de la Industria de Reuniones, la pérdida económica por la cancelación de eventos de este giro fue de 267 millones de pesos en 2020 y la eliminación de 400 mil empleos en todo el país.
En el sur de Tamaulipas se lograron reagendar algunos eventos que se tenían contemplados en 2020 y se pasaron al 2021.