Dos sacerdotes son investigados en la Diócesis de Tampico por denuncias de abuso sexual que pesan en su contra, así lo reconoció en rueda de prensa la tarde de este jueves el señor obispo José Armando Álvarez Cano al darse a conocer la aprobación del Papa Francisco para la eliminación del secreto pontificio.
Sin compartir la información precisa de los hechos que se le imputan a los dos curas, Álvarez Cano refirió que a uno de ellos se le ha prohibido oficiar y que ambos tendrán que cumplir con un tratamiento psicológico que la Iglesia exige al concluir el juicio que por Ley se práctica desde hace dos años.
Detalló que en uno de los juicios no hubo manera de comprobar los hechos de abuso, sin embargo, la Iglesia brinda el apoyo necesario a las familias para que expongan sus casos y sea la autoridad quien determine la situación.
“Había cuando yo llegué dos (sacerdotes) que se les está dando trámite que se están terminando, tienen uno o dos años, sí hay denuncia en su contra, en el juicio nosotros hicimos lo propio para mediar las cosas, lo que nos corresponde, al parecer ya se está concluyendo (el juicio) porque no hubo demostraciones claras del asunto”, expresó ante los medios de comunicación reunidos.
Al ser cuestionado sobre si los acusados continúan realizando su labor de evangelización, fue claro al decir que “hay algunos casos, depende del tipo de denuncia que se está haciendo, algunos no están oficiando, van a tener un tratamiento como lo manda la Iglesia cuando una persona tiene una cuestión así se envía para que se analice su caso, para que vean su cuestión personal”.
Acerca de los sacerdotes que son investigados, no brindó nombres ni residencia, únicamente señaló que son parte de la Diócesis de Tampico, reconociendo que Tamaulipas es una de las entidades con mayor señalamientos en estos temas, lo que dijo es una situación de dolor y tristeza en la que la Iglesia está haciendo un esfuerzo por esclarecer con la postura que tomo el Papa Francisco.
“Tamaulipas es una de las zonas más golpeadas de abuso, México a nivel de los grupos de países de este bloque, es el que más abusos tiene, tristemente es uno de los países que tiene este problema a nivel mundial mucho más grande”, patentó añadiendo que “los protocolos están muy claros, inmediatamente cuando se sabe de una situación se está obligado a denunciar a las personas”.
“Yo creo que la Iglesia está haciendo un gran esfuerzo por esclarecer todo esto, a nosotros nos ha dolido mucho esta situación y se tiene trabajando en distintos aspectos, aquí en nuestra Diócesis ya estamos formalizando el equipo que es de psicólogos, abogados, sacerdotes que quisiéramos llevar a cabo”, puntualizó.