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Empresas nacionales y extranjeras tienen en marcha inversiones por cerca de 550 millones de dólares en tres proyectos de construcción de terminales para importar y almacenar combustibles que abastezcan al noreste, centro y Bajío del país desde el puerto industrial de Altamira.
Consorcios privados anunciaron desde el año pasado sus intenciones de edificar instalaciones marítimas para aprovechar las ventajas que ofrece el puerto de Altamira en cuanto a facilidades de importación, almacenamiento y distribución de combustibles, cuyo mercado se espera que crezca de manera exponencial en el mediano y largo plazo en México.
Roberto Díaz de León, presidente de la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo y Derivados (Onexpo), señaló que de acuerdo con la información disponible, se tiene confirmada la intención de las compañías Avant Energy; Grupo Garel y otros asociados, así como Grupo Mexicano de Desarrollo (GMD) y Cooper/T. Smith Stevedoring Company para construir tres terminales, operar equipos y prestar servicios de importación, almacenamiento y distribución de combustibles, cuya demanda se espera aumente en los siguientes años a partir de la apertura que ofrece la participación privada en este sector.
Avant Energy construirá el proyecto denominado Sistema de Suministro de Petrolíferos Altamira-Bajío (Supera), con instalaciones para almacenar en Altamira y Querétaro, con una capacidad para 1.2 millones de barriles de combustible, que le permitirán tener una reserva de hasta 15 días de venta, y distribuir 100,000 barriles diarios.
En Querétaro, la terminal tendrá una capacidad de 450,000 barriles.
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