/ jueves 2 de julio de 2020

Ocurrencias del futbol | Todo llega en el momento adecuado, si sabemos prepararnos

A propósito del gol 700 de Lionel Messi, recién anotado en el último juego del Barcelona contra el Atlético de Madrid, los informadores de la especialidad, celosos de la historia de su tiempo, ubican a Pelé en el selecto grupo de jugadores que han alcanzado esa cifra, basándose solamente en los goles anotados únicamente en partidos oficiales, sin tomar en cuenta los juegos amistosos.

En los tiempos de Pelé no existían tantas competencias internacionales como las hay actualmente. Son muchos los expertos en salud deportiva que han hecho observaciones al respecto, la gran intensidad competitiva es dañina para la salud del jugador. A los representantes de Pelé se les advirtió de ello.

El récord más importante de Pelé no es el de goles anotados (1,281), sino el número de partidos jugados (1,363), el Santos de Pelé era comparable con los famosos basquetbolistas "The Glover Troters", abundaban las invitaciones de todas partes del mundo para que el Santos se presentara en juegos de exhibición, la condición era que jugara Pelé, así, este gran atleta participaba en 92 juegos anuales, lo que ocasionó que una comisión sanitaria le advirtiera que, de seguir así, difícilmente podría disfrutar de una larga vida.

Son tantas las historias alrededor de la condición propuesta por los equipos que contrataban al Santos, respecto a la presencia de Pelé en los juegos, que muchas de esas historias han sido negadas por el mismo Pelé, quien confiesa no recordar que hubiesen existido. Una de las más conocidas es aquella en la que durante muchos años se ha informado de manera generalizada, que Pelé detuvo la Guerra Civil de Nigeria, cuando los dos bandos bajaron sus armas para permitir que el pueblo nigeriano viera jugar a Pelé en un juego previamente pactado contra la selección nigeriana.

La guerra comenzó el 6 de julio de 1967 y finalizó el 15 de enero de 1970 y fue causada por la separación del estado de Biafra de Nigeria, siendo recordada como una de las guerras más sangrientas. Pero los medios reconocen a Pelé el mérito de instar un alto al fuego, aunque este haya durado poco tiempo. La otra historia muy comentada es la que ocurrió el 17 de julio de 1968, en el estadio Campini de Bogotá, cuando el Santos enfrentó a una selección colombiana que se preparaba para los juegos Olímpicos de México.

En aquel juego fungió como árbitro Guillermo "Chato" Velázquez, un exboxeador que entró en una fuerte discusión con Pelé, quien protestaba por un penal que no le fue concedido al Santos por supuesta falta sobre uno de sus jugadores. Pelé, molesto, se puso a vociferar, dedicando al silbante unas groserías dichas en portugués, pero resultó que el "Chato" hablaba también portugués, así que lo echó del juego, Pelé salió corriendo, pero sus compañeros de la banca "agredieron" al "Chato", quien se declaró incapaz de continuar por estar lesionado, entonces la directiva colombiana ordenó que dirigiera el partido el primer auxiliar de Velázquez y que Pelé regresara al juego. Caso único en Colombia, en donde un árbitro que sufrió una agresión por parte de extranjeros fue sacado del juego por los directivos de su propio país, permitiendo el regreso al campo de un jugador extranjero que había sido expulsado.

Pelé y Velázquez se encontraron muchas veces más en Juegos Panamericanos, en Copa América, en Copa Libertadores, terminando en una amistad cordial. Guillermo "Chato" Velázquez recuerda su último encuentro, cuando Pelé jugaba para el Cosmos, "¡Ah!, aquí estás bandido, nos fundimos en un fuerte abrazo y luego me invitó con mi familia, a cenar en su casa junto a la de él".

EL GOL 700, IGUAL AL 1000 DE PELÉ

El gol 700 de Lionel Messi, por razones que solo el destino sabe, fue igual al gol 1000 de Pelé, conseguido desde los 11 metros. La diferencia es que el de Pelé tardó seis juegos en llegar, algo extraño ya que la densidad productiva de Pelé dificultaba que no anotara gol en cada juego. Y siguen los detalles que asemejan a estos dos grandes jugadores, que habían pensado que ese gol tan importante sería producto de una jugada genial, no de un penalti. Y cierra Pelé con esta reflexión: "De pronto comprendí que el milésimo era un gol como cualquier otro: había que hacer entrar el balón en la red; la cifra era lo de menos y llegaría cuando Dios quisiera".

Pero, finalmente, todo acaba, Pelé ya se retiró y Messi no tardará en hacerlo, Pelé ahora confiesa: "Ahora comprendo la importancia de lo que hacía. Preocupado como estaba por el rendimiento del equipo, no me daba cuenta de que estaba efectuando una transición en mi vida. Empezaba a ver el campo de juego desde afuera, con una perspectiva más amplia, y por ese motivo ejercía casi una labor docente: daba consejos en base a mi experiencia".

Hasta pronto amigo.

A propósito del gol 700 de Lionel Messi, recién anotado en el último juego del Barcelona contra el Atlético de Madrid, los informadores de la especialidad, celosos de la historia de su tiempo, ubican a Pelé en el selecto grupo de jugadores que han alcanzado esa cifra, basándose solamente en los goles anotados únicamente en partidos oficiales, sin tomar en cuenta los juegos amistosos.

En los tiempos de Pelé no existían tantas competencias internacionales como las hay actualmente. Son muchos los expertos en salud deportiva que han hecho observaciones al respecto, la gran intensidad competitiva es dañina para la salud del jugador. A los representantes de Pelé se les advirtió de ello.

El récord más importante de Pelé no es el de goles anotados (1,281), sino el número de partidos jugados (1,363), el Santos de Pelé era comparable con los famosos basquetbolistas "The Glover Troters", abundaban las invitaciones de todas partes del mundo para que el Santos se presentara en juegos de exhibición, la condición era que jugara Pelé, así, este gran atleta participaba en 92 juegos anuales, lo que ocasionó que una comisión sanitaria le advirtiera que, de seguir así, difícilmente podría disfrutar de una larga vida.

Son tantas las historias alrededor de la condición propuesta por los equipos que contrataban al Santos, respecto a la presencia de Pelé en los juegos, que muchas de esas historias han sido negadas por el mismo Pelé, quien confiesa no recordar que hubiesen existido. Una de las más conocidas es aquella en la que durante muchos años se ha informado de manera generalizada, que Pelé detuvo la Guerra Civil de Nigeria, cuando los dos bandos bajaron sus armas para permitir que el pueblo nigeriano viera jugar a Pelé en un juego previamente pactado contra la selección nigeriana.

La guerra comenzó el 6 de julio de 1967 y finalizó el 15 de enero de 1970 y fue causada por la separación del estado de Biafra de Nigeria, siendo recordada como una de las guerras más sangrientas. Pero los medios reconocen a Pelé el mérito de instar un alto al fuego, aunque este haya durado poco tiempo. La otra historia muy comentada es la que ocurrió el 17 de julio de 1968, en el estadio Campini de Bogotá, cuando el Santos enfrentó a una selección colombiana que se preparaba para los juegos Olímpicos de México.

En aquel juego fungió como árbitro Guillermo "Chato" Velázquez, un exboxeador que entró en una fuerte discusión con Pelé, quien protestaba por un penal que no le fue concedido al Santos por supuesta falta sobre uno de sus jugadores. Pelé, molesto, se puso a vociferar, dedicando al silbante unas groserías dichas en portugués, pero resultó que el "Chato" hablaba también portugués, así que lo echó del juego, Pelé salió corriendo, pero sus compañeros de la banca "agredieron" al "Chato", quien se declaró incapaz de continuar por estar lesionado, entonces la directiva colombiana ordenó que dirigiera el partido el primer auxiliar de Velázquez y que Pelé regresara al juego. Caso único en Colombia, en donde un árbitro que sufrió una agresión por parte de extranjeros fue sacado del juego por los directivos de su propio país, permitiendo el regreso al campo de un jugador extranjero que había sido expulsado.

Pelé y Velázquez se encontraron muchas veces más en Juegos Panamericanos, en Copa América, en Copa Libertadores, terminando en una amistad cordial. Guillermo "Chato" Velázquez recuerda su último encuentro, cuando Pelé jugaba para el Cosmos, "¡Ah!, aquí estás bandido, nos fundimos en un fuerte abrazo y luego me invitó con mi familia, a cenar en su casa junto a la de él".

EL GOL 700, IGUAL AL 1000 DE PELÉ

El gol 700 de Lionel Messi, por razones que solo el destino sabe, fue igual al gol 1000 de Pelé, conseguido desde los 11 metros. La diferencia es que el de Pelé tardó seis juegos en llegar, algo extraño ya que la densidad productiva de Pelé dificultaba que no anotara gol en cada juego. Y siguen los detalles que asemejan a estos dos grandes jugadores, que habían pensado que ese gol tan importante sería producto de una jugada genial, no de un penalti. Y cierra Pelé con esta reflexión: "De pronto comprendí que el milésimo era un gol como cualquier otro: había que hacer entrar el balón en la red; la cifra era lo de menos y llegaría cuando Dios quisiera".

Pero, finalmente, todo acaba, Pelé ya se retiró y Messi no tardará en hacerlo, Pelé ahora confiesa: "Ahora comprendo la importancia de lo que hacía. Preocupado como estaba por el rendimiento del equipo, no me daba cuenta de que estaba efectuando una transición en mi vida. Empezaba a ver el campo de juego desde afuera, con una perspectiva más amplia, y por ese motivo ejercía casi una labor docente: daba consejos en base a mi experiencia".

Hasta pronto amigo.