La población de 20 a 30 años de edad se ha convertido en la principal transmisora del SARS-CoV-2 al no identificar los síntomas de manera oportuna y con ello, incumplir en el confinamiento que permite cortar la cadena de contagios.
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Héctor Pérez Monsiváis, jefe de la Jurisdicción Sanitaria N°II con base en Tampico, reveló que dicho sector poblacional son los que representan la mayor incidencia de positividad en la conurbación, en esta curva al alza que ha tomado la pandemia.
Sin embargo, dijo, que no identifican los síntomas de alerta del virus mortal al confundirlo con un catarro común derivado a los cambios constantes de temperatura, por lo que acuden a atención médica cuando la enfermedad ya se encuentra avanzada, o bien, cuando han contagiado a sus familiares o compañeros de labores.
“Como no tienen un cuadro tan severo, lo confunden con un catarro común, así se quedan con esa idea, pero no piensan en que son transmisores, por eso los casos se siguen dando y tenemos registros de mortandad en personas más jóvenes de 40 a 50 años”.
Pérez Monsiváis hizo el llamado a la población joven a atenderse de manera inmediata “insistimos en que primero se piense en coronavirus, toda persona que tenga datos que hagan sospechar que se han contagiado, deben de acudir a consulta para hacerles el diagnóstico diferencial o indicarles la prueba”.
Finalmente precisó que los primeros síntomas de coronavirus son tos seca, fiebre, opresión en el pecho, pérdida del sentido del olfato y gusto, diarrea, dificultad para respirar, cansancio extremo, dolor de piernas, de articulaciones, de cabeza, ojos rojos o conjuntivitis, malestar general.
El entrevistado dijo que aun cuando se desarrolle la enfermedad de manera ‘leve’ se debe de mantener el confinamiento y la distancia social, a fin de evitar complicaciones en el resto de la población a la que se puede llegar a contagiar.
