Es durante las noches que un cocodrilo ronda por las calles del Moralillo, situación que preocupa a los vecinos debido a que en ese sector no hay alumbrado, lo que aumenta el riesgo de un encuentro “muy cercano” con el saurio. En ocasiones, son los mismos residentes los que saben que ya se acerca por el sonido que hace al caminar.
Así lo expresaron los habitantes de las calles 23 de Mayo y Sor Juana Inés de la Cruz a EL SOL DE TAMPICO, detallando que desde hace dos semanas este ejemplar de alrededor de metro y medio sale con mayor frecuencia a las calles que, al no estar pavimentadas y mantenerse en penumbra, con la humedad se han vuelto “un pantano” para este animal.
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“Los vecinos ya lo había visto en el canal y se subía al bordo a tomar el sol(…) El detalle es que sale en la noche, ya van varios vecinos que lo vemos, no mide tres metros, pero más de metro y medio sí mide. Se esconde entre la maleza, en el día sí lo alcanzas a ver, pero cuando ya se sale a la calle es por la noche”, describió Bertha Rangel.
COCODRILO ENCUENTRA SU “SEGUNDO HOGAR”
En este sentido, recordó que fue hace ocho meses cuando lo vieron por primera vez y aunque en un principio no le tomaron importancia puesto que era pequeño y permanecía en el canal del bordo de protección en el Moralillo, pero ahora la situación se ha agravado debido a que creció, mide más de un metro y medio y ha empezado a considerar las calles como su segundo hogar.
Finalmente, Bertha Rangel hizo un llamado a las autoridades para que acudan y reubiquen al animal, ya que al estar tan cerca de las personas puede suscitarse algún accidente.
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