El mega apagón que se presentó en el norte de México el lunes y los cortes intermitentes generados por la Comisión Federal de Electricidad martes y hoy miércoles han afectado severamente la industria y empresas de la frontera de Tamaulipas, quienes siguen sumando pérdidas económicas.
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La situación de abasto, aunado a las gélidas temperaturas que siguen presentándose, tiene paralizada la zona norte de la entidad, donde se contemplan pérdidas millonarias, ya que los constantes apagones han afectado a unas 250 maquiladoras que ofrecen empleo al menos 210 mil trabajadores.
“Las pérdidas son difíciles de calcular en este momento porque pues es tiempo perdido, son materiales que se desperdician por los paros constantes y arranques, porque tenemos energía por unas horas y luego se va”, declaró a El Sol de Tampico, el vicepresidente de la Cámara de la Industria de la Transformación (Canacintra), región Tamaulipas, Rogelio García Treviño.
Aunque Cancintra reporta a nivel nacional pérdidas de hasta 18 mil millones de pesos, la cifra sigue aumentando, ya que desde esta región se exporta material automotriz, médico y electrónico a Estados Unidos, además del consumo nacional.
“En Tamaulipas aún no podemos decir exactamente cuánto, pero sí es muy grande -la afectación económica- porque tenemos una fuerte industria de transformación para la exportación desde Reynosa, Matamoros, Río Bravo, Valle Hermoso, Nuevo Laredo”, puntualizó.
“Son horas perdidas de producción que no se pueden recuperar y además son las posibles fallas a los equipos electrónicos”, agregó.
Urgió que el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) abra una canal de información con este sector para disminuir las afectaciones en las 250 empresas que existen entre Matamoros y Reynosa.
“En la mañana se reportan unas plantas trabajando, se va la luz y luego son otras las que están con energía, esto está sucediendo en las ciudades de la región fronteriza. No hay un interlocutor del Cenace con la industria, entonces pues estamos a la expectativa”, informó.
Señaló que el otro problema ocurre con los más de 210 mil trabajadores, cuyos patrones no saben sin enviarlos a casa o mantenerlos en guardias en espera de que se active el suministro de energía eléctrica. “La dificultad que es tener a todo el personal además con frío esperando para ver si va a llegar la luz o no, con el temor y la disyuntiva de tenerlos esperando o irse a su casa”, argumentó.
El representante de Canacintra destacó que hace dos años un tornado derribó unas torres de transmisión, lo que generó que pasaran una semana laborando en medio de suministro irregular.
