El Gobierno de Tamaulipas emitió lo que catalogó como “una llamada a la vida” debido al incremento de casos confirmados de coronavirus en la entidad. El gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca indicó que el estado podría vivir la crisis de salud más severa de toda su historia si la gente no comienza a actuar de manera responsable frente a la pandemia.

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A través de un video con duración de 4:33 minutos, el mandatario remarcó que Tamaulipas está a punto de declarar una saturación en los servicios médicos, “las cifras más recientes del sistema de salud estatal indican que en algunos municipios los contagios de Covid-19 se han disparado concretamente en Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros. Estamos muy próximos a declarar cero disponibilidad de camas y de ventiladores para pacientes de Covid-19”.

Por lo anterior, remarcó que, si la irresponsabilidad de la ciudadanía continúa, el sistema de salud se vería forzado a atender los casos graves en campamentos improvisados, lo que representaría grandes riesgos para todos, “de seguir así, los hospitales públicos y privados habilitados para Covid-19 serán saturados y tendremos que improvisar campamentos para atender a las personas contagiadas con los riesgos que esto implica”.

Manifestó que no es justo seguir exponiendo al personal que está en la primera línea de batalla frente a la pandemia, por la irresponsabilidad de unos cuantos. “O todos actuamos de manera solidaria y responsable o pronto nos enfrentaremos a la crisis de salud más severa que quizá haya Tamaulipas en su historia”, subrayó García Cabeza de Vaca.

En este sentido, sentenció que el esfuerzo que deben hacer los tamaulipecos no es solo por ellos, sino por su familia y por los demás, “este esfuerzo será tan sencillo como acatar las medidas de recomendación; por el momento paren fiestas, reuniones y concentraciones masivas, es momento de que tú te cuides y esta es una llamada a la vida que confío en que todos la escuchemos”.

Finalmente recordó que la pandemia no es ningún mito, sino “una triste realidad por la cual ya hay medio millón de muertes en el mundo, cerca de 130 mil en México y más de 500 en Tamaulipas que son un cruel testimonio de una realidad donde no podemos cerrar los ojos”.