Aun cuando Petróleos Mexicanos (Pemex) se comprometió a concluir la rehabilitación de la refinería “Francisco I. Madero” para diciembre del año pasado, casi tres meses después de ese plazo la petrolera no tiene fecha de reencendido de este complejo del sur de Tamaulipas.
La factoría se encuentra frenada en su producción desde el último cuatrimestre del año 2017, lo que ha generado afectaciones a sectores de proveedores y subcontratistas que tienen parados los contratos con Pemex, mermando su capacidad de operación.
Cuestionado sobre este proceso de reencendido, el vocero de la compañía petrolera en la región, Omar García Vázquez, aseguró que “no puedo dar una fecha exacta porque obviamente depende de proceso de prueba y cuánto demore el mantenimiento; este proceso de apagado fue de manera escalonada y de esta forma se hará el reencendido”.
De las nueve plantas que fueron sometidas a procesos de reparación mayor por medio de licitaciones de empresas internacionales “unas ya comenzaron el proceso de prueba y en otros casos aún no se concluyen los trabajos de reparaciones”.
Pemex asegura que se encuentran en cumplimiento de los tiempos planteados para el proceso de rehabilitación, pero en el boletín No. 032/2017, emitido el 23 de agosto del año 2017, se mencionaba que: “Se estima que para fines de diciembre de este año -2017- se logre la estabilidad operativa en los procesos de la refinería”.
Otra decena de plantas fue sometida a reparaciones menores por personal de la misma empresa, quedando el complejo en producción cero, afectando sustancialmente aspectos como el precio de combustibles que ha sufrido un incremento constante de septiembre del año pasado a la fecha.
Sobre la posible fecha de arranque, García Vázquez aseveró que “eso depende de la fase de pruebas y cuando termine, no puedo decir tal día porque no sé la fecha puesto que depende de esas pruebas que salgan bien para dar paso al reencendido, pero por el momento no hay ninguna -planta- operando”.
Sectores como la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) han asegurado que este prolongado paro ha impactado negativamente en áreas como la proveeduría y subcontratistas que han visto detenidos o cancelados sus contratos desde septiembre del año pasado.