Aunque la vacuna de la influenza forma parte del esquema de la mujer embarazada al ser considerada una enfermedad viral de alto riesgo tanto para la gestante como para el bebe, persiste el miedo a desarrollar complicaciones.
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Se estima que en Tampico, de cada diez mujeres embarazadas nueve acceden a la aplicación del biológico por insistencia del cuerpo médico y una llega al final del proceso sin la vacunación que disminuye los riesgos de complicaciones en caso de contagiarse de la enfermedad respiratoria.
Genaro Ortíz Rentería, director del Centro de Salud de Tampico, señaló que la principal causante a este fenómeno antivacunas es la desinformación y la falta de confianza, lo que lamentó, al señalar que por los cambios fisiológicos que se presentan durante la gestación, la mujer se vuelven más vulnerables y propensas a infecciones.
“Todavía existe el miedo, como cualquier otra enfermedad y proceso viral, de que creen que se van a poner mal, pero se debe de tener el conocimiento de que la vacuna hace efectividad y no provoca problema, sí, se tiene dolor en la parte en que se aplica y un ligero adormecimiento, pero nada que ponga en riesgo la vida del bebe o de la mama”.
Recordó que el año pasado, durante la jornada de vacunación que es de octubre a marzo, lograron que un mayor porcentaje de embarazadas se aplicaran la dosis, al hablarles por teléfono y exhortarlas a asistir a la unidad médica, explicándoles de manera privada, directa y personal, los beneficios que tiene la vacuna en esta etapa de la vida.
Sin embargo, señaló que la vacuna se debe de aplicar antes del quinto mes o iniciando el embarazo, porque se tienen hasta seis veces más de riesgo de complicaciones por influenza durante la maternidad, por lo que durante el año se tienen las dosis necesarias para la población gestante, afirmando que es seguro e inocuo para el producto.
