Tampico es conocida como la Nueva Orleans de México y no hace honor a este nombre solo por su arquitectura, sino también por su cultura musical con toques de alegría y nostalgia.
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Parte de esta variedad cultural incluye al jazz que Sergio hace sonar en las calles, él convierte los paseos por el centro histórico en un verdadero deleite no solo a la vista, sino también al más exigente oído.
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Armado con una bocina, un bajo y su amor por la música, Sergio hace mover las cabezas de los viandantes de la zona centro al ritmo del jazz, quienes, aunque sea por unos segundos se dejan abrazar por el armonioso sonido.
Los acordes han sido su pasión desde hace más de 10 años y hoy con una licenciatura en música ejerce como maestro de artes, además de realizar presentaciones en distintos restaurantes y eventos sociales; con ello el joven músico busca impulsar su proyecto Escala de Andrómeda.
Terminado el ciclo escolar, con los restaurantes y eventos sociales suspendidos por parte de la Secretaría de Salud (SST), Sergio vio mermados sus ingresos y para mantener vivos sus sueños recurrieron al compartir su arte en las calles, pues mantener su proyecto musical en las plataformas de streaming tiene un costo elevado.
Es usual ver a los artistas urbanos por nuestras calles quienes, en el lenguaje universal de la música, hacen vibrar las almas de los paseantes y te llenan el corazón a un mismo compás mientras caminas por el centro de Tampico.
