Este 16 de octubre de 2020 se cumplen 18 años de que el Himno de Tamaulipas es el canto oficial a la entidad y de la obligatoriedad de ser entonado en todo acto cívico estatal.
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La designación oficial como tal se realizó con el fin de reforzar la identidad y sentido de pertenencia en especial, entre las nuevas generaciones de tamaulipecos incluyendo aquellos originarios de otras regiones y que por diferentes circunstancias residen en la entidad.
Rogelio Caballero, de la Secretaría de Educación en Tampico señaló que, el Himno de Tamaulipas es considerado uno de los símbolos de la entidad, aunque su origen era inicialmente un canto dedicado a la ciudad de Matamoros.
Expuso que, como parte de esta reglamentación estatal, es obligado que, el Himno de Tamaulipas se entone inmediatamente después del Himno Nacional Mexicano en todo acto cívico en la entidad.
Señaló que, si bien el canto a la entidad data de principios del siglo pasado, no había una formalidad para ser utilizado como tal y quedaba a criterio su interpretación en los eventos públicos.
En ese sentido y para solventar este vacío, el 16 de octubre de 2002 el Honorable Congreso del Estado mediante el decreto número 93, expidió la Ley del Escudo de Armas y el Himno de Tamaulipas que regula jurídicamente las características, el uso y la difusión de los símbolos de la entidad.
Caballero recordó que en la página del gobierno de Tamaulipas se indica que fue con motivo de los festejos del primer centenario de dicha ciudad fronteriza, que se celebraron el 30 y 31 de diciembre de 1925, así como el 1 y 2 de enero de 1926, cuando se compuso el himno en honor a Matamoros, cuya letra fue inspiración del Prof. Rafael Antonio Pérez Pérez.
Agregó que, con datos de esa misma fuente, se establece que la música fue obra del Prof. Alfredo Tamayo Marín y la instrumentación corrió a cargo del músico y profesor José María Barrientos.
En la página del gobierno de Tamaulipas se señala que el tema fue ejecutado por la Banda de Música del Estado bajo la dirección del Prof. Simón Prado para acompañar el Himno de Matamoros a todos los alumnos participantes.
Su estructura musical era de canción y la letra originalmente decía: “Viva Matamoros, invicta y heroica la ciudad que dormita en la margen del río…” por lo que, en el año de 1926, el gobernador Emilio Portes Gil solicitó autorización al autor del Himno a Matamoros, para adoptarlo como Himno al Estado, concediéndose el permiso, adaptando su letra.
De 1926 a 1957 su ejecución en actos oficiales, públicos y escolares se hizo en forma original: Viva Tamaulipas, altiva y heroica la región que dormita en la margen del río… En 1957 por sugerencia de la Sociedad Mexicana de Musicología se le hicieron unas modificaciones para facilitar su canto y enfatizar su condición de himno.
