Bajo observación se encuentra el brote de neumonía registrado en la ciudad de Wuhan, en el centro de China, al ser provocada por un virus no identificado, ya que temen este pudiera extenderse a otras partes de Asia y Occidente.
La Organización Mundial de la Salud considera a este aún como brote ya que no ha pasado la mencionada población para que se considere epidemia ni ha llegado a otras partes del mundo para ser pandemia.
Según las primeras investigaciones del hecho los primeros contagiados acudieron a un mercado de venta de pescado en esa ciudad, aunque otra investigación apunta a la convivencia de los residentes de esta zona con animales como cerdos, caballos, carneros, perros y gatos.
De esta zona de China han surgido los virus respiratorios más complejos por lo que se cree que un factor determinante es que al pasar de especie en especie estos mutan y forman estas variaciones difíciles de atacar.
La OMS ha considerado que el mundo no está preparado para una pandemia como la registrada en 1918, hace 102 años, por lo que han establecido acciones para contener el brote de neumonía que a diferencia de casos ordinarios el virus que la provoca es desconocido y varios de los pacientes han empeorado hasta quedar al borde de la muerte.
Se han descartado la gripe, la gripe aviar, los adenovirus y otras enfermedades respiratorias comunes, afirmó la Comisión de Salud de Wuhan.
Por esta situación ha resurgido temas como el Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SRAS) o la neumonía atípica que dejó más de 700 muertos y 8 mil infectados en varios países entre 2002 y 2003.