Tras varias semanas de arder sin control y haber consumido un estimado de más de tres mil 500 hectáreas, finalmente fue controlado en su totalidad el incendio en la sierra de Miquihuana y Bustamante, que son parte de la reserva natural del estado.
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Durante más de un mes el fuego se expandió, debido a la sequedad del suelo a consecuencia de la prolongada sequía que afecta a la entidad, por la región de Bustamante, misma que alberga una vasta reserva de pinos.
Cuadrillas de la Unidad de Protección Civil de Tamaulipas y de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), apoyados con helicópteros de autoridades estatales y de otras entidades, realizaron labores como limpieza del terreno para evitar el avance del fuego.
Durante varias horas al día se realizaron sobrevuelos para el rociado de agua, así como retardantes, lo que fue complementado por las lluvias registradas en la entidad que fue recorrida por el frente frío número 54.
En lo que va del presente año son más de 11 los incendios registrados en varios puntos de la entidad siendo el más grave es la región de Miquihuana y Bustamante, tanto por extensión de daños y duración.
Conforme a lo dado a conocer, en el 2019 se registraron 33 grandes incendios que afectaron más de seis mil 221 hectáreas afectadas; mientras que en 2020 se reportaron 13 situaciones de riesgo y una afectación de 357 hectáreas.
