/ martes 25 de agosto de 2020

Acontecer político | PRI: Negro diagnóstico

Existe una historia hilarante sobre un boxeador estaba siendo vapuleado por su rival, por lo que al llegar a su esquina, pidió que tiraran la toalla pues estaba a punto del nocaut. Ante esto, el manager le dijo: “no te preocupes, arreglé para que en la transmisión de radio digan que vas ganando”. Algo parecido le pasó en su momento al perdidoso candidato del PRI a la gubernatura de Tamaulipas, BALTAZAR HINOJOSA OCHOA.

Cuando las encuestas imparciales señalaban que estaba por debajo en las intenciones del voto frente al aspirante panista JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA y que hasta en el transporte público, supuestamente controlado por organizaciones cetemistas, aparecía el emblema de los cuernos, sus asesores le presentaban sondeos manipulados en los que aparecía hasta con 15 puntos porcentuales arriba de su oponente.

Así, mientras que para la generalidad era evidente que la campaña de BALTAZAR estaba haciendo agua, su equipo, como en el cuento del boxeador, le aseguraba que no tenía de que preocuparse. El resultado ya todos lo sabemos.

Un 5 de junio se derrumbó un imperio político que había dominado en la entidad a lo largo de ocho décadas, dejando al antes invencible partido en una verdadera orfandad, con todas las consecuencias que ello implicaba.

Hoy vemos que aquella aplanadora que se había construido con base en complicidades, amistades y compadrazgos, está totalmente desmantelada y con pocas o nulas posibilidades de rearmarse.

El Partido Revolucionario Institucional quedó herido de muerte y difícilmente podrá recuperarse para estar en condiciones de ser competitivo en los comicios del 2021.Sin ser gobierno, el PRI se convirtió en pedacería y muchos de sus militantes que en tiempos de gloria juraban y perjuraban fidelidad, en la derrota brincaron a otros partidos en busca de seguir pegados a la ubre presupuestal.

Durante muchos años solo se repartieron el pastel los grupos de Matamoros y Ciudad Victoria, de donde salían la mayoría de los gobernadores y dirigentes estatales del PRI. Cuando CAVAZOS LERMA vio que ÁLVARO GARZA CANTÚ se encaminaba a un segundo período como alcalde de Tampico, operó para meterle zancadilla, consciente de que el hombre del Posada de Tampico quedaría en condición de ser candidato del PRI a la gubernatura. También desde aquellas latitudes temieron que el FERNANDO AZCÁRRAGA LÓPEZ, dos veces alcalde porteño quedara en una plataforma de lanzamiento y se la ingeniaron para que fuera derrotado cuando luego buscó ser diputado federal.

Ahora ni en Matamoros, ni en Ciudad Victoria y mucho menos en Tampico, hay grupos priistas con el músculo suficiente para dar pelea en el proceso por las diputaciones federales, locales y los ayuntamientos. Y su dirigencia estatal encabezada por EDGAR MELHEM simplemente es como el planeta Mercurio, se sabe que existe, pero nadie la ve. Y lo mismo pasa con los directivos en las localidades.

Hemos platicado con políticos experimentados que han ocupado puestos importantes y que conocen bien las entrañas priistas y todos coinciden en el negro diagnóstico de que será muy problemático que haya una recuperación del partido tricolor en Tamaulipas, pues no se sabe que haya prospectos competitivos, empezando por nuestra zona conurbada.

Así, desde ahora se dibuja el escenario en el que el Partido Acción Nacional, que es la fuerza política por hoy dominante en la entidad, solo tendría que preocuparse por el Movimiento de Regeneración Nacional, que, como partido no se observa muy cuajado y solo tendría la palanca del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.

La excepción es el municipio de Ciudad Madero, donde la exitosa administración del morenista ADRIÁN OSEGUERA KERNION, le crea el entorno favorable para su reelección, aunque ya está recibiendo metralla de sus opositores para descarrilarlo. Otro aspirante de la misma fracción, ERASMO GONZÁLEZ, tiene pocas posibilidades de disputarle la candidatura. Así está el actual acontecer político.

Cambiemos de tema. Hasta donde nos ha llevado la pandemia del coronavirus. Ayer se inició el ciclo escolar, por primera vez en nuestra historia, de manera virtual, sin las clases presenciales de antaño donde el salón de clases era el cuartel de ese enorme ejército de estudiantes. Lo malo es que quienes no tengan una computadora o un celular programado no podrán acceder al esquema didáctico. Pero es la única forma de evitar que la congregación en las escuelas aumente la línea de trasmisión del covid 19. Adiós, al menos por ahora, a los pizarrones y los mesabancos.

Esto se suma a los demás trastornos, como el cierre o la suspensión temporal de negocios con los consiguientes despidos de personal y la restricción, en lo general, de las actividades económicas y productivas, no solo a nivel municipal o estatal, sino municipal.

No se sabe cuándo ira a parar esto, pero lo que sí es cierto es que la población no debe relajar de manera extrema las medidas preventivas, pues de ello depende aminorar el número de contagios y de decesos. Se cierran los supermercados y las tiendas de conveniencia a temprana hora, principalmente los fines de semana, en los que también hay “ley seca” y se prohíben los actos masivos y sin embargo cada día se anuncian nuevos casos positivos en el estado.

El siglo XXI está resultando crucial para la humanidad que está ante una nueva amenaza sanitaria como las que han diezmado a la población de muchos países en épocas pasadas.

E-mail: raulpazos45@gmail.com

Existe una historia hilarante sobre un boxeador estaba siendo vapuleado por su rival, por lo que al llegar a su esquina, pidió que tiraran la toalla pues estaba a punto del nocaut. Ante esto, el manager le dijo: “no te preocupes, arreglé para que en la transmisión de radio digan que vas ganando”. Algo parecido le pasó en su momento al perdidoso candidato del PRI a la gubernatura de Tamaulipas, BALTAZAR HINOJOSA OCHOA.

Cuando las encuestas imparciales señalaban que estaba por debajo en las intenciones del voto frente al aspirante panista JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA y que hasta en el transporte público, supuestamente controlado por organizaciones cetemistas, aparecía el emblema de los cuernos, sus asesores le presentaban sondeos manipulados en los que aparecía hasta con 15 puntos porcentuales arriba de su oponente.

Así, mientras que para la generalidad era evidente que la campaña de BALTAZAR estaba haciendo agua, su equipo, como en el cuento del boxeador, le aseguraba que no tenía de que preocuparse. El resultado ya todos lo sabemos.

Un 5 de junio se derrumbó un imperio político que había dominado en la entidad a lo largo de ocho décadas, dejando al antes invencible partido en una verdadera orfandad, con todas las consecuencias que ello implicaba.

Hoy vemos que aquella aplanadora que se había construido con base en complicidades, amistades y compadrazgos, está totalmente desmantelada y con pocas o nulas posibilidades de rearmarse.

El Partido Revolucionario Institucional quedó herido de muerte y difícilmente podrá recuperarse para estar en condiciones de ser competitivo en los comicios del 2021.Sin ser gobierno, el PRI se convirtió en pedacería y muchos de sus militantes que en tiempos de gloria juraban y perjuraban fidelidad, en la derrota brincaron a otros partidos en busca de seguir pegados a la ubre presupuestal.

Durante muchos años solo se repartieron el pastel los grupos de Matamoros y Ciudad Victoria, de donde salían la mayoría de los gobernadores y dirigentes estatales del PRI. Cuando CAVAZOS LERMA vio que ÁLVARO GARZA CANTÚ se encaminaba a un segundo período como alcalde de Tampico, operó para meterle zancadilla, consciente de que el hombre del Posada de Tampico quedaría en condición de ser candidato del PRI a la gubernatura. También desde aquellas latitudes temieron que el FERNANDO AZCÁRRAGA LÓPEZ, dos veces alcalde porteño quedara en una plataforma de lanzamiento y se la ingeniaron para que fuera derrotado cuando luego buscó ser diputado federal.

Ahora ni en Matamoros, ni en Ciudad Victoria y mucho menos en Tampico, hay grupos priistas con el músculo suficiente para dar pelea en el proceso por las diputaciones federales, locales y los ayuntamientos. Y su dirigencia estatal encabezada por EDGAR MELHEM simplemente es como el planeta Mercurio, se sabe que existe, pero nadie la ve. Y lo mismo pasa con los directivos en las localidades.

Hemos platicado con políticos experimentados que han ocupado puestos importantes y que conocen bien las entrañas priistas y todos coinciden en el negro diagnóstico de que será muy problemático que haya una recuperación del partido tricolor en Tamaulipas, pues no se sabe que haya prospectos competitivos, empezando por nuestra zona conurbada.

Así, desde ahora se dibuja el escenario en el que el Partido Acción Nacional, que es la fuerza política por hoy dominante en la entidad, solo tendría que preocuparse por el Movimiento de Regeneración Nacional, que, como partido no se observa muy cuajado y solo tendría la palanca del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.

La excepción es el municipio de Ciudad Madero, donde la exitosa administración del morenista ADRIÁN OSEGUERA KERNION, le crea el entorno favorable para su reelección, aunque ya está recibiendo metralla de sus opositores para descarrilarlo. Otro aspirante de la misma fracción, ERASMO GONZÁLEZ, tiene pocas posibilidades de disputarle la candidatura. Así está el actual acontecer político.

Cambiemos de tema. Hasta donde nos ha llevado la pandemia del coronavirus. Ayer se inició el ciclo escolar, por primera vez en nuestra historia, de manera virtual, sin las clases presenciales de antaño donde el salón de clases era el cuartel de ese enorme ejército de estudiantes. Lo malo es que quienes no tengan una computadora o un celular programado no podrán acceder al esquema didáctico. Pero es la única forma de evitar que la congregación en las escuelas aumente la línea de trasmisión del covid 19. Adiós, al menos por ahora, a los pizarrones y los mesabancos.

Esto se suma a los demás trastornos, como el cierre o la suspensión temporal de negocios con los consiguientes despidos de personal y la restricción, en lo general, de las actividades económicas y productivas, no solo a nivel municipal o estatal, sino municipal.

No se sabe cuándo ira a parar esto, pero lo que sí es cierto es que la población no debe relajar de manera extrema las medidas preventivas, pues de ello depende aminorar el número de contagios y de decesos. Se cierran los supermercados y las tiendas de conveniencia a temprana hora, principalmente los fines de semana, en los que también hay “ley seca” y se prohíben los actos masivos y sin embargo cada día se anuncian nuevos casos positivos en el estado.

El siglo XXI está resultando crucial para la humanidad que está ante una nueva amenaza sanitaria como las que han diezmado a la población de muchos países en épocas pasadas.

E-mail: raulpazos45@gmail.com