/ martes 2 de noviembre de 2021

Acontecer político | Tamaulipas, escenario extraño

“El Truco” desdibuja una percepción Morena, dos finalistas.

En Tamaulipas se está presentando un escenario electoral por demás extraño, en el que viejas rencillas entre los gobiernos federal y estatal prácticamente han desaparecido, en el que hay un precandidato panista que se mueve sin restricción en busca de la estafeta blanquiazul y en el que aparecen muchos aspirantes de MORENA, aparentemente dándose hasta con la cubeta, pero que en el fondo podrían estar respondiendo a la vieja conseja de que “hasta para estar en descuerdo hay que ponerse de acuerdo”.

Es del dominio público que hasta hace un año, el gobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA era uno de los principales contestatarios del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR y fue impulsor de aquel famoso grupos del “GOAN”, integrado por mandatarios de Acción Nacional que se reunían en distintas partes del país donde gobernaban para criticar las acciones del actual Gobierno de la República.

Pero luego vino una denuncia contra CABEZA DE VACA, su familia y algunos de sus más cercanos colaboradores, por supuestos delitos de lavado de dinero y conexión con la delincuencia organizada, que derivó en un juicio de procedencia ante la Cámara de Diputados que resolvió que el tamaulipeco debía ser separado de su cargo para enfrentar las acusaciones ante órganos de justicia federal.

Pero el mandatario estatal CABEZA DE VACA hizo frente a las imputaciones y maniobró para que la legislatura local rechazara el dictamen reclamando para sí el derecho a emitir el veredicto final, y luego mediante un amparo, se logró que el procedimiento no tuviera los efectos de la instancia federal, controversia que se encuentra pendiente de resolución en la Suprema Corte de Justicia que hasta ahora no se ha pronunciado al respecto, pese a que el expediente tiene meses en sus manos. Y para quien dedica un poco de atención a los asuntos políticos, no pasa desapercibido que hoy, ni CABEZA DE VACA ni el Presidente de la República intercambian críticas.

Es más, el mandatario tamaulipeco fue recibido por el nuevo Secretario de Gobernación, con quien mantuvo una conversación “institucional”. Y el Gobernador del Estado sigue ejerciendo sus funciones al cien por ciento en la entidad, como si nada hubiera pasado.

¿Qué fue lo que pasó? ¿Hubo algún acuerdo en las alturas para desactivar los desencuentros entre las dos instancias en aras de llevarse la fiesta en paz en beneficio de las partes encontradas?

En las elecciones de junio pasado, el Movimiento de Regeneración Nacional se llevó los principales municipios de la zona fronteriza, la mismísima capital del estado y refrendó su supremacía en Ciudad Madero, además de lograr la mayoría en el Congreso local.

Muchos interpretaron este hecho como parte de los acuerdos para que, a cambio de disolución de los cargos contra el gobernador CABEZA DE VACA, este cediera al partido guinda la mayor tajada del pastel.

A partir de entonces, se generó la percepción de que Morena, con cualquiera que fuera su candidato, ganaría fácilmente la gubernatura del estado por el descrédito en el que habrían caído el actual Gobernador y Acción Nacional, que no tendrían nada que hacer en la contienda electoral. Pero hoy vemos que un personaje panista rompe con ese esquema y se lanza a la cancha en busca no solo de la candidatura blanquiazul, sino de la propia gubernatura del estado. Ese es el exalcalde de Xicoténcatl y actual secretario de Gobierno, CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS, cuya figura está siendo proyectada a través de la organización “Todos por Tamaulipas”, que le arrima miles de simpatizantes en muchos municipios del estado.

Sería ingenuo pensar que “El Truco”, como se le conoce, se hubiera lanzado al ruedo sin el consentimiento de su jefe, que aún conserva el poder suficiente para dictar instrucciones sobre cómo deben hacerse las cosas en materia política en la entidad que gobierna. Pero también es dable pensar que, antes de embarcarse en esta aventura, VERÁSTEGUI OSTOS debió dejar muchas cosas en claro.

Los enterados en el tema no pasan por alto que desde que “El Truco” inició su peregrinar por la geografía tamaulipeca, la dirigencia estatal del PAN se deslindó del movimiento argumentando que no eran los tiempos electorales. Y, por lo que se sabe, ningún funcionario de alto nivel en la actual administración estatal, ni siquiera en el área de Prensa y Relaciones Públicas, puede meter mano en “Todos por Tamaulipas”. Esto habla de un principio de deslinde, desde luego previamente convenido.

Mientras tanto, en el Movimiento de Regeneración Nacional, la competencia entre los aspirantes a la candidatura continúa, aunque queda claro que muchos de los que la pretendían van quedando a la zaga, pues en los hechos nunca tuvieron una real posibilidad y evidentemente solo buscan que se les dé acomodo en una eventual administración morenista.

Los sondeos de mayor coincidencia indican que el senador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA y el delegado estatal de Bienestar Social, RODOLFO GONZÁLEZ VALDERRAMA, que por cierto nació en Tampico, son los finalistas en la carrera.

Así que vemos en el plano electoral tamaulipeco a un prospecto panista que desdibuja la percepción de que Tamaulipas será entregado fácilmente a Morena. Pero también no se cancela del todo que la ciudadanía está desencantada del PAN y votará en contra, tal como lo hizo en los anteriores comicios. Así que el escenario luce más que interesante. Será en las urnas donde las cosas se pondrán en claro.

“El Truco” desdibuja una percepción Morena, dos finalistas.

En Tamaulipas se está presentando un escenario electoral por demás extraño, en el que viejas rencillas entre los gobiernos federal y estatal prácticamente han desaparecido, en el que hay un precandidato panista que se mueve sin restricción en busca de la estafeta blanquiazul y en el que aparecen muchos aspirantes de MORENA, aparentemente dándose hasta con la cubeta, pero que en el fondo podrían estar respondiendo a la vieja conseja de que “hasta para estar en descuerdo hay que ponerse de acuerdo”.

Es del dominio público que hasta hace un año, el gobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA era uno de los principales contestatarios del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR y fue impulsor de aquel famoso grupos del “GOAN”, integrado por mandatarios de Acción Nacional que se reunían en distintas partes del país donde gobernaban para criticar las acciones del actual Gobierno de la República.

Pero luego vino una denuncia contra CABEZA DE VACA, su familia y algunos de sus más cercanos colaboradores, por supuestos delitos de lavado de dinero y conexión con la delincuencia organizada, que derivó en un juicio de procedencia ante la Cámara de Diputados que resolvió que el tamaulipeco debía ser separado de su cargo para enfrentar las acusaciones ante órganos de justicia federal.

Pero el mandatario estatal CABEZA DE VACA hizo frente a las imputaciones y maniobró para que la legislatura local rechazara el dictamen reclamando para sí el derecho a emitir el veredicto final, y luego mediante un amparo, se logró que el procedimiento no tuviera los efectos de la instancia federal, controversia que se encuentra pendiente de resolución en la Suprema Corte de Justicia que hasta ahora no se ha pronunciado al respecto, pese a que el expediente tiene meses en sus manos. Y para quien dedica un poco de atención a los asuntos políticos, no pasa desapercibido que hoy, ni CABEZA DE VACA ni el Presidente de la República intercambian críticas.

Es más, el mandatario tamaulipeco fue recibido por el nuevo Secretario de Gobernación, con quien mantuvo una conversación “institucional”. Y el Gobernador del Estado sigue ejerciendo sus funciones al cien por ciento en la entidad, como si nada hubiera pasado.

¿Qué fue lo que pasó? ¿Hubo algún acuerdo en las alturas para desactivar los desencuentros entre las dos instancias en aras de llevarse la fiesta en paz en beneficio de las partes encontradas?

En las elecciones de junio pasado, el Movimiento de Regeneración Nacional se llevó los principales municipios de la zona fronteriza, la mismísima capital del estado y refrendó su supremacía en Ciudad Madero, además de lograr la mayoría en el Congreso local.

Muchos interpretaron este hecho como parte de los acuerdos para que, a cambio de disolución de los cargos contra el gobernador CABEZA DE VACA, este cediera al partido guinda la mayor tajada del pastel.

A partir de entonces, se generó la percepción de que Morena, con cualquiera que fuera su candidato, ganaría fácilmente la gubernatura del estado por el descrédito en el que habrían caído el actual Gobernador y Acción Nacional, que no tendrían nada que hacer en la contienda electoral. Pero hoy vemos que un personaje panista rompe con ese esquema y se lanza a la cancha en busca no solo de la candidatura blanquiazul, sino de la propia gubernatura del estado. Ese es el exalcalde de Xicoténcatl y actual secretario de Gobierno, CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS, cuya figura está siendo proyectada a través de la organización “Todos por Tamaulipas”, que le arrima miles de simpatizantes en muchos municipios del estado.

Sería ingenuo pensar que “El Truco”, como se le conoce, se hubiera lanzado al ruedo sin el consentimiento de su jefe, que aún conserva el poder suficiente para dictar instrucciones sobre cómo deben hacerse las cosas en materia política en la entidad que gobierna. Pero también es dable pensar que, antes de embarcarse en esta aventura, VERÁSTEGUI OSTOS debió dejar muchas cosas en claro.

Los enterados en el tema no pasan por alto que desde que “El Truco” inició su peregrinar por la geografía tamaulipeca, la dirigencia estatal del PAN se deslindó del movimiento argumentando que no eran los tiempos electorales. Y, por lo que se sabe, ningún funcionario de alto nivel en la actual administración estatal, ni siquiera en el área de Prensa y Relaciones Públicas, puede meter mano en “Todos por Tamaulipas”. Esto habla de un principio de deslinde, desde luego previamente convenido.

Mientras tanto, en el Movimiento de Regeneración Nacional, la competencia entre los aspirantes a la candidatura continúa, aunque queda claro que muchos de los que la pretendían van quedando a la zaga, pues en los hechos nunca tuvieron una real posibilidad y evidentemente solo buscan que se les dé acomodo en una eventual administración morenista.

Los sondeos de mayor coincidencia indican que el senador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA y el delegado estatal de Bienestar Social, RODOLFO GONZÁLEZ VALDERRAMA, que por cierto nació en Tampico, son los finalistas en la carrera.

Así que vemos en el plano electoral tamaulipeco a un prospecto panista que desdibuja la percepción de que Tamaulipas será entregado fácilmente a Morena. Pero también no se cancela del todo que la ciudadanía está desencantada del PAN y votará en contra, tal como lo hizo en los anteriores comicios. Así que el escenario luce más que interesante. Será en las urnas donde las cosas se pondrán en claro.