/ domingo 4 de febrero de 2024

Paradigmas | Ramsar y la Laguna del Carpintero

Ramsar es la parte más verde de Irán. La proximidad al bosque y mar otorgó una belleza especial a esta ciudad que atrae a más de 10 millones de turistas, debido a sus cascadas, aguas termales, parques forestales, cuevas, manantiales... Los principales productos de Ramsar son el arroz, los cítricos y el té. Su economía se basa en las industrias de la agricultura, la ganadería y el turismo.

El 2 de febrero de 1971, diecinueve países suscribieron en la ciudad de Ramsar un Convenio Internacional que lleva el nombre de esta urbe y que obliga a los países firmantes a llevar a cabo una planificación del suelo y del agua que garantice la protección de sus humedales. Los humedales son una zona de tierras normalmente plana donde la superficie del suelo se cubre del vital líquido de forma permanente o estacional, puede ser dulce, salada o salobre. Sin embargo, no todo suelo que se llena de fluido es considerado un humedal, para eso, el sitio debe contener agua durante un período de tiempo suficiente para que prospere la flora acuática.

México cuenta con 142 sitios designados como Humedales de Importancia Internacional (sitios Ramsar), con una superficie de 8,657,057 hectáreas. Por mencionar solo algunos están: los pantanos de Centla, en Tabasco; Cuatro Ciénegas, en Coahuila; Río Lagartos, en Yucatán; Marismas Nacionales, en Nayarit; hasta Xochimilco y Tláhuac en la Ciudad de México Tampico es una ciudad privilegiada al contar con una laguna natural casi al centro de la ciudad.

El humedal de la Laguna del Carpintero es un cuerpo de agua salobre, forma parte del estuario del río Pánuco, en la confluencia con el río Tamesí y el Golfo de México.

Hace dos semanas acudí a uno de los restaurantes ubicados en las orillas de la Laguna del Carpintero. Al caminar rumbo al sitio, cuál fue mi sorpresa al tener que respirar los nauseabundos olores que despedía el humedal. Eran tan intensos, que estábamos mi acompañante y yo sentadas ingiriendo nuestros alimentos, cuando aún mi nariz mantenía la hediondez.

Qué vergüenza para los locales como será para los visitantes, que se tratara de hermosear un sitio con áreas recreativas, locales comerciales y demás, posponiendo una acción indispensable para el medio ambiente como es el saneamiento de la Laguna. Cómo es posible que los munícipes hayan dejado pasar el tiempo sin solucionar este serio problema, que data de toda una vida.

Respetables autoridades municipales tienen una deuda con la Laguna del Carpintero y por ende con el Convenio Internacional Ramsar, esperemos a ver hasta cuándo trazan un plan descontaminante, purificador, por el bien de los ciudadanos que andamos en la búsqueda de zonas peatonales y de recreación. Por el bien de la Laguna del Carpintero, por el bien del planeta.

lupitarico@hotmail.com

Ramsar es la parte más verde de Irán. La proximidad al bosque y mar otorgó una belleza especial a esta ciudad que atrae a más de 10 millones de turistas, debido a sus cascadas, aguas termales, parques forestales, cuevas, manantiales... Los principales productos de Ramsar son el arroz, los cítricos y el té. Su economía se basa en las industrias de la agricultura, la ganadería y el turismo.

El 2 de febrero de 1971, diecinueve países suscribieron en la ciudad de Ramsar un Convenio Internacional que lleva el nombre de esta urbe y que obliga a los países firmantes a llevar a cabo una planificación del suelo y del agua que garantice la protección de sus humedales. Los humedales son una zona de tierras normalmente plana donde la superficie del suelo se cubre del vital líquido de forma permanente o estacional, puede ser dulce, salada o salobre. Sin embargo, no todo suelo que se llena de fluido es considerado un humedal, para eso, el sitio debe contener agua durante un período de tiempo suficiente para que prospere la flora acuática.

México cuenta con 142 sitios designados como Humedales de Importancia Internacional (sitios Ramsar), con una superficie de 8,657,057 hectáreas. Por mencionar solo algunos están: los pantanos de Centla, en Tabasco; Cuatro Ciénegas, en Coahuila; Río Lagartos, en Yucatán; Marismas Nacionales, en Nayarit; hasta Xochimilco y Tláhuac en la Ciudad de México Tampico es una ciudad privilegiada al contar con una laguna natural casi al centro de la ciudad.

El humedal de la Laguna del Carpintero es un cuerpo de agua salobre, forma parte del estuario del río Pánuco, en la confluencia con el río Tamesí y el Golfo de México.

Hace dos semanas acudí a uno de los restaurantes ubicados en las orillas de la Laguna del Carpintero. Al caminar rumbo al sitio, cuál fue mi sorpresa al tener que respirar los nauseabundos olores que despedía el humedal. Eran tan intensos, que estábamos mi acompañante y yo sentadas ingiriendo nuestros alimentos, cuando aún mi nariz mantenía la hediondez.

Qué vergüenza para los locales como será para los visitantes, que se tratara de hermosear un sitio con áreas recreativas, locales comerciales y demás, posponiendo una acción indispensable para el medio ambiente como es el saneamiento de la Laguna. Cómo es posible que los munícipes hayan dejado pasar el tiempo sin solucionar este serio problema, que data de toda una vida.

Respetables autoridades municipales tienen una deuda con la Laguna del Carpintero y por ende con el Convenio Internacional Ramsar, esperemos a ver hasta cuándo trazan un plan descontaminante, purificador, por el bien de los ciudadanos que andamos en la búsqueda de zonas peatonales y de recreación. Por el bien de la Laguna del Carpintero, por el bien del planeta.

lupitarico@hotmail.com