En esta época de confinamiento los mandalas son una buena opción de relajación que traen beneficios a la salud mental, emocional y espiritual, por lo que se está recomendando mucho esta técnica que incluso se utiliza con fines terapéuticos.
Aunque parece que son nuevas, su origen se remonta a la cultura hindú, son muy antiguos, pero gracias a la tecnología digital actual se pusieron de moda.
La maestra de Reiki Certificada en Japón, Silvia Luz Rábago Castro, señala que el término “mandalas” se traduce como círculo, “son dibujos cargados de energía, simbolismo y espiritualidad y que se hacen principalmente en arena, papel y tela”.
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Es un recurso que se utiliza en personas de todas las edades que desean tener un entretenimiento con su mente enfocada.
LOS BENEFICIOS SON VARIOS
No se trata solo de dibujar formas basadas en círculos, sino verdaderamente entrar en conciencia para recibir los beneficios de esta técnica.
La elaboración de mandalas se relaciona con calmar la mente, estimular el pensamiento creativo, reducir el estrés, aumentar la autoestima, inducir a la tranquilidad y reafirmar las habilidades de disciplina y exactitud.
Se dice que “al estar creando un mandala es como si estuvieras meditando y son muy recomendables para las personas mayores, porque les mantiene la mente activa”.
PINTAR MANDALAS
Para poder pintar mandalas se recomienda buscar un lugar donde te sientas cómodo, relajado y tranquilo, con buena ventilación e iluminación, llevar todos los materiales que vayas a necesitar para no interrumpir el proceso de pintar, elegir un diseño que refleje cómo te sientes en ese instante, puedes escuchar música relajante o estar en silencio.
Un tip es “iniciar con ejercicios de respiración para relajarte y que puedas pintar con toda tranquilidad”.
LOS MANDALAS Y LOS NIÑOS
Silvia considera que los mandalas no son un retroceso a la etapa infantil, “en los últimos años se han popularizado nuevas técnicas de relajación e inspiración y una de ellas es por medio de los mandalas a través de la creación artística como la pintura y las actividades para colorear”.
En el caso de los niños “los mandalas son dibujos casi siempre circulares, que pueden contribuir a la relajación, concentración y la inspiración artística de los pequeños”, resalta.
FANS DE LOS MANDALAS
Para Irma Alicia Hernández Pérez “los mandalas representan para mí una manera creativa de sanar el alma mediante su creación y me han ayudado a reducir el estrés y la tristeza, además me provocan mucha tranquilidad y relajación”.
Por su parte Ana Cecilia Barrón Rangel dice que “a una corta edad empecé a tener ciertos problemas de estrés y ansiedad, entonces comencé a dibujar y eso me ayudó y sin darme cuenta me adentré a esa afición de realizar diversos tipos de mandalas. Es algo muy significativo para mi vida, ya que me ayudaron muchísimo como terapia y como base para poner en práctica mi creatividad”.
