Exploradores realizaron el hallazgo de osamentas al interior de una cueva en Tamaulipas e hicieron un llamado a las autoridades para que procedan a su conservación, al considerar que podrían ser restos que datan de cientos de años, posiblemente de una tribu ancestral.
Integrantes de la Asociación Tamaulipeca de Antigüedades y Coleccionistas (ATAC) confirmaron lo anterior y compartieron algunas de sus fotografías con EL SOL DE TAMPICO, para dar a conocer su hallazgo.
Mediante sus redes sociales detallaron que los rumores de que en la Sierra Madre había una cueva repleta de osamentas existía desde la década de los 70, “curiosos de ver si el rumor era verdad, fuimos a buscar esas cuevas(…) hace unas semanas fuimos en busca de la principal y quinta cueva, era la que estaba llena de restos óseos y ofrendas”.
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DÓNDE FUERON LOCALIZADAS LAS CUEVAS
En su página de Facebook @Asociación-Tamaulipeca-De-Antigüedades-y-Coleccionistas-ATAC describieron que su recorrido para llegar hasta dicha cueva inició en el ejido San Antonio, desde donde caminaron alrededor de cuatro kilómetros.
“Subimos varios cerros y bajamos algunas pendientes; el sol, la sed, el cansancio y el hambre ya eran evidentes, poco antes de llegar al objetivo estaba una planicie llena de vegetación árida y seca donde decidimos descansar, comer e hidratarnos”, fue en este punto cuando se percataron de una cavidad en el terreno.
QUÉ ENCONTRARON LOS EXPLORADORES
“A los pocos metros pudimos observar las primeras osamentas y ofrendas. Más al fondo se abría una gran cámara secundaria alta y ancha con una roca de enorme tamaño en el centro, como si fuera el asiento o lugar de reposo de la autoridad mayor”, explicaron a sus seguidores.
En este sentido, los exploradores también detallaron que había hojas de maíz, semillas y chiles, además de fragmentos de barro.
“Lo que pudimos observar es que los huesos tienen pequeñas diferencias anatómicas a los actuales, huesos más pequeños y delgados. Creemos que estas personas medían entre 1 metro 40 centímetros y 1.50 de alto y eran de complexión muy delgada, las mandíbulas un poco diferentes a las de las personas actuales, nos da a entender que tal vez estos restos humanos tengan cientos o tal vez miles de años ocultos en esas cuevas”.
UN LLAMADO A LAS AUTORIDADES
Al considerar que se trata de un tesoro histórico, los miembros de la ATAC optaron únicamente por retratar el hallazgo y por esa misma razón decidieron omitir las coordenadas exactas donde se encuentran los restos que, estiman, podrían ser de una civilización antigua, incluso anterior a los janambres o pames.
“Se hace un llamado a las autoridades correspondientes de investigar este tipo de lugares para que lo visiten y se pueda preservar (…), no diremos ubicación exacta, solo será entregada a las autoridades correspondientes”, subrayaron en su comunicado.
Finalmente, tras el hallazgo de osamentas y ofrendas en una cueva de Tamaulipas, los exploradores enfatizaron la necesidad de proteger y preservar el patrimonio histórico, “esperamos que este sitio localizado en el corazón de la Sierra Madre pronto sea un lugar protegido y preservado”.
