#Especial | La UAT, un alma autónoma

Más que una celebración el Día de la Autonomía Universitaria es una conmemoración, recordando a aquellos que con manifestaciones, huelgas y pronunciamientos decidieron levantar la voz para exigir lo que por derecho les correspondía: libertad.

El 3 de Marzo es considerado el Día de la Autonomía Universitaria, aunque realmente esta fue reconocida hasta el 15 de marzo de 1967 cuando el Periódico Oficial del Gobierno de Tamaulipas expide el Decreto 145 y 146 que le concede la autonomía a la Universidad de Tamaulipas, que este año cumple sus primeros 70 años de existencia.

Local

Tampico y sus edificios centenarios

Este día -el 3- es designado para recordar a aquellos que hace más de medio siglo decidieron tomar acciones y lograr lo que hoy es una realidad en los diversos campus de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT).

Los registros históricos señalan que el 1 de marzo de 1967 perdieron la vida Flavio Rocha Lerma, coordinador estudiantil y Enrique García Guevara, principal orador del movimiento; el primero fue sepultado el día 2 y el segundo el 3 de marzo.

Eran tiempos del gobernador priista Praxedis Balboa Gojón, cuando por igual las escuelas de Tampico, Ciudad Mante y Ciudad Victoria se levantaron en diversas manifestaciones para exigir que la Universidad fuera un organismo independiente.

Se realizó la Reunión del Consejo de Huelga en la Plaza Juárez de Ciudad Victoria, para tratar el tema mientras que en Tampico se replicaban huelgas de hambre y una marcha desde el puerto hasta la capital de la entidad.

Los albores del movimiento de autonomía comenzaron desde octubre de 1966 con movilizaciones; en febrero de 1967 aumentaron considerablemente y para el 27 de febrero de ese año arrancó la caminata de Tampico a Ciudad Victoria para exigir respeto a la autonomía.

Desde hace 53 años la UAT es Autónoma | Antonio Sosa

Son muchos los que se recuerdan entre los que estuvieron en estos movimientos, como del Comité de la Facultad de Derecho Florencio Bonilla, Héctor Domínguez y Ricardo Ramírez Pérez; de la Escuela de Medicina Misael Uribe, Martín Sánchez, Gamaliel Saldívar o Juan Gómez Canales; de Enfermería estuvo Esthela Garza y Raquel López; Ingeniería Crespo y Lucino Cervantes; así como de Comercio Miguel y Juan Salman; aunque la lista es mucho más grande.

Once años después de su creación lo anhelado llegó, el 15 de marzo de 1967 se publicó en el Periódico Oficial del Gobierno de Tamaulipas lo que costó cansancio, caminatas, dolor, hambres, sufrimientos y hasta muertes para tener esta Alma Mater Autónoma.

ES UN PRIVILEGIO

Valorar la autonomía ha trascendido los últimos 53 años entre docentes, académicos, personal administrativo y de apoyo.

“La autonomía es un privilegio que pocas universidades tienen, que significa que es independiente de las decisiones gubernamentales”, dijo la Dra. Dulce Alexandra Cepeda Robledo, docente de la Universidad Autónoma de Tamaulipas.

Percibe este proceso “como una cualidad en la que la universidad puede transitar hacia contextos más actuales, adecuados a la demanda del sector laboral sin tener que depender del gobierno para tomar decisiones académicas, sin embargo sí para que los registros sean legales”.

En el marco de su 70 aniversario la UAT muestra una trayectoria y cientos de profesionales formados “con alto prestigio y gran cantidad de egresados que pueden dar fe de la calidad de la universidad.

En 70 años se ha podido incidir en la sociedad para ofrecer mejores profesionistas capaces de dar respuesta a las necesidades sociales”.

El Día de la Autonomía no es solo un día inhábil, representa reconocer y enaltecer el respeto de aquellos que decidieron luchar para lograr la libertad de un Alma Mater Autónoma, con decisión para actuar y decidir sobre su futuro.

Dra. Dulce Alexandra Cepeda Robledo, docente de la Universidad Autónoma de Tamaulipas | Gabriel Flores