Más de 900 familias del norte de Veracruz fueron afectadas por el gusano cogollero que devastó el 90% de las 2 mil 200 hectáreas de cultivos y pastizales, situación que causó que se perdiera toda la producción, a pocos días de tener un respiro por las lluvias.
El representante de los campesinos del municipio de Pueblo Viejo, León Almazán Zavala, manifestó que se contemplaba que con las primeras precipitaciones pluviales traería un respiro para el campo veracruzano, el cual había sufrido los estragos del estiaje.
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Pero desafortunadamente las lluvias trajeron consigo la aparición del gusano cogollero, también conocido como oruga de la col, oruga del tabaco y oruga del Viejo Mundo; las larvas de esta especie llegan a alimentarse de una amplia gama de plantas incluyendo aquellas cultivadas en la zona.
Agregó que esta plaga se propagó por mil 980 hectáreas de más de 900 pequeños propietarios que habitan en 12 comunidades de los municipios de Pueblo Viejo y Tampico Alto, mismos que presentan un panorama desolador a causa del daño causado por esta especie.
“Es lamentable que el 90% de las hectáreas del norte de Veracruz hayan sido afectadas por el gusano cogollero. Esta plaga nos agarró desprevenidos mientras nosotros festejamos por la presencia de las lluvias que traía un respiro después de una prolongada sequía”.
Destacó que las localidades afectadas son: el sector agrícola de La Anáhuac, El Crucero, González Ortega, María Quinta de la Nieves, El Kilómetro 15, Emiliano Zapata, Benito Juárez, El Sendero, Mata de Pedernales, Paciencia y Aguacate, en donde las familias perdieron todo su producción.
Los expertos señalan que el gusano cogollero es una plaga que causa severas pérdidas si no se controla oportunamente, ya que el poder de adaptación a diferentes condiciones le permite mantenerse hasta causar daños económicos anualmente durante los ciclo de cultivos.
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El daño de las larvas pueden alcanzar altas poblaciones debido a que una palomilla hembra puede depositar hasta 200 huevecillos, las cuales están presentes desde el momento en que emergen y permanecen en las pequeñas plantas de maíz como en otros cultivos.
