Jaumave es promovido turísticamente como un lugar de agua y enormes árboles, sin embargo, esta imagen dista de la realidad donde sus habitantes denuncian que por sequía se han perdido alrededor de 10 mil nogales.

Este municipio, ubicado casi en el centro de Tamaulipas, se distinguía por su producción de nuez y la siembra en el campo, que actualmente también se encuentra reducida.

“Estamos preocupados porque hemos perdido unos 7 mil, 10 mil nogales y las autoridades de uno u otro partido no resuelven. Nadie nos hace caso, ni la Presidencia, ni Gobierno Estatal, estamos en una situación muy difícil, todo está seco”, declaró a EL SOL DE TAMPICO, Guadalupe Uvalle, habitante de Jaumave que ha conformado un grupo de defensa del agua.

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La mujer, maestra de profesión, señaló que de nueve canales que abastecían de agua a la población de este lugar, actualmente sólo les permiten utilizar dos. “Somos un grupo de ciudadanos que se organiza para lograr que nos entreguen el agua, cuando yo era chica nos decían que el agua es del pueblo y de repente, ya la tiene la presidencia”, informó.

La activista Mayra Septien García, quien se ha unido a esta lucha, enfatizó que no se trata de una aspiración romántica el tema de la falta de árboles.

“Si no hay árboles no hay sistema hídrico, si no hay árboles no llueve; no es que seamos ecologistas y nos gusten los pajaritos, que sí nos gustan pero no es una cuestión de lujo, es la base de todo, del sistema hídrico dependemos. Los bosques son las fábricas de agua”, enfatizó.

“JAUMAVE SÓLO TIENE AGUA EN PAPEL”

Septién García señaló que Jaumave enfrenta un problema serio de falta de agua, no obstante, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha autorizado concesiones basándose en información obtenida hace 5 décadas. “El agua que tienen en papel en Conagua no es el número real del acuífero; digamos que la medición en la que han basado sus condiciones es de los años 70's; empezaron a dar concesiones a diestra y siniestra sin tomar en cuenta la naturaleza de recarga del acuífero”, explicó.

Detalló que este municipio se abastece de una toma de recarga en Palmillas que ha sido sobreexplotada y que actualmente está cobrando factura. “Ha sufrido una sobreexplotación y ni Semarnat, ni Conagua, ni Conafor -Comisión Nacional Forestal-, ni nosotros como usuarios hemos puesto la atención para cuidar las zonas de recarga, para que vuelva a llover en las zonas altas”, mencionó. “La naturaleza es muy sabia y sola se puede restaurar si se lo permitimos y no se lo estamos permitiendo, para eso son las áreas de veda, son una disposición muy sabia pero no se están llevando a cabo”, añadió.

TAMAULIPAS CARECE DE INSTRUMENTOS DE MEDICIÓN DE SEQUÍA

Declaró que en la región de Jaumave ha dejado de llover con regularidad desde hace tres años pese a que para Conagua en este municipio no existe el estiaje.

“Te dice el mapa no hay sequía pero si sales y le preguntas a tres personas o a diez todos te van a decir que por supuesto que lo hay; es porque no hay mediciones, no hay un hoidrómetro”, apuntó.

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Destacó que tampoco existen estaciones meteorológicas que ofrezcan información precisa sobre las condiciones que imperan en la entidad. “Conagua en lugar de declarar que no hay datos, en sus mapas pone que no hay sequía y esto nos aleja de programas de restauración”, detalló. Propuso que con base en datos reales se conformen mesas de trabajo donde se analicen alternativas para restaurar el daño ambiental.

URGEN ABASTO DE AGUA

El representante de la Asociación de Usuarios del Canal Común de esta comunidad, Diego Becerra de la Cruz, acusó que la desorganización por parte de la autoridad federal es lo que ha complicado la crisis de estiaje que ya existe en el territorio tamaulipeco.

“El alma y corazón de Jaumave son los higuerones, los nogales y los sabinos que están en la entrada del pueblo, esos árboles los plantaron los fundadores hace más 400 de años y ya se cayó un higuerón, no han querido sembrar otro higuerón”, puntualizó.

“Hay mucha toma clandestina, hay gente que no paga el agua, hay gente que no tiene medidor”, reveló.

SAN VICENTE, EL EJIDO QUE LLEVA UNA DÉCADA SIN SEMBRAR

San Vicente es un ejido de Jaumave que tras la entrega de concesiones de agua por parte de Conagua se quedaron sin el suministro, por lo que sus habitantes optaron por abandonar el campo y buscar trabajo en empresas y plazas comerciales de lugares como Ciudad Victoria.

“Nos dejaron a los campesinos sin agua, el ganado se ha quedado sin agua por causas de este problema. En mi ejido ni agua llevaba el canal, muy apenas tenemos para tomar del río”, denunció Lázaro Juárez, residente de este lugar.

Destacó que esta situación comenzó desde hace una década que Conagua otorgó permisos a los productores de limón.

“Tenemos más de 10 años que no levantamos cosecha, se sembraba maíz, frijol, pero al no haber agua todos se empezaron a ir”, lamentó.