Dos primos que viajaban a bordo de una motocicleta en la carretera interestatal Puerto Industrial de Altamira-Morón-Aldama perdieron la vida de forma trágica, al ser impactados de frente por una avioneta cuyo piloto y acompañante realizaron un aterrizaje forzoso al registrar una falla la aeronave, que minutos antes había despegado del Aeropuerto Internacional “General Francisco Javier Mina” de Tampico, en ruta hacia la ciudad fronteriza de Reynosa.
En base al informe de las autoridades de Protección Civil del municipio de Altamira, a cargo de César Vázquez Jáuregui, el trágico accidente aéreo se registró a las 14:40 horas en el kilómetro 6+500 de la referida rúa interestatal, a la altura del lugar conocido como Las Marraneras, en el tramo comprendido entre los poblados Lomas del Real-Aquiles Serdán o El Barranco, cuando la aeronave pretendía realizar un aterrizaje forzoso después de que el piloto efectuó el reporte de una falla mecánica a la torre de control del aeropuerto de Tampico.
La avioneta siniestrada es una Cessna 206, con razón social "JC Station Air”, y matrícula XB-ILM, color blanco con dos franjas de tono azul cielo y marino, la cual quedó con la parte frontal en dirección al norte enclavada a tres metros de la orilla de la cinta asfáltica y frente a unos matorrales de dos metros y medio de altura, a consecuencia del impacto con la motocicleta.
En base al informe de testigos de este lamentable hecho, se desconocen los generales del piloto de la aeronave, que aprovechó que la carretera interestatal de 12 metros de ancho y edificada a base de concreto asfáltico se encontraba despejada para realizar el aterrizaje forzoso en una recta de un kilómetro, comprendida entre los poblados Lomas del Real y El Barranco, pero jamás imaginó que se encontraría de frente con los ocupantes de una motocicleta que circulaba en dirección de sur a norte.
SE DESPLAZABAN HACIA EL BARRANCO
En este inusual accidente aéreo perdieron la vida las dos personas que se encontraban en tierra y que eran primos hermanos, José “N”, de 17 años de edad, estudiante del Centro de Educación Media Superior a Distancia (CEMSADET) No. 26, con sede en Lomas del Real, y Eder “N”, de 21 años, empleado de una empresa del corredor industrial, quienes iban en dirección de sur a norte a bordo de una motocicleta color negro, tripulada por el primero.
Los cuerpos de los infortunados jóvenes quedaron completamente destrozados sobre la cinta asfáltica y en la parte central de la vialidad, a una distancia de cinco metros uno del otro,en tanto el vehículo en que viajaban terminó en el carril de sur a norte, completamente destrozado.
Los familiares de las víctimas informaron a la autoridad policíaca que los jóvenes iban del poblado El Barranco hacia Lomas del Real, después de que José “N” había salido de clases del CEMSADET Nº. 26 y aparentemente manejaba la moto, que era propiedad de Eder, por lo que los deudos no daban crédito a la tragedia ocurrida.
Hasta el lugar del trágico accidente arribaron elementos de Marina asignados a la vigilancia al puerto de Altamira, y posteriormente personal del Ejército, policías estatales, de la Federal División Caminos, Protección Civil y Tránsito local, quienes acordonaron el área del trágico percance para posteriormente cerrar el tráfico vial en esa carretera interestatal que comunica del puerto industrial de Altamira a Aldama, una distancia de 130 kilómetros aproximadamente.
DESCONOCEN CAUSAS DEL PERCANCE AÉREO
El director de Protección Civil en el municipio, César Vázquez Jáuregui, afirmó desconocer las causas reales del accidente, “solo sabemos que el piloto reportó a la torre de control del aeropuerto de Tampico que tenía un problema en el tren del aterrizaje y realizó esa maniobra sobre la carretera, en dirección de norte a sur, pero jamás se imaginó encontrar a los motociclistas”, explicó.
En cuanto a la identidad del piloto y su acompañante, el entrevistado mencionó: “desconocemos quién o quiénes viajaban en la aeronave, cuando llegamos no encontramos a nadie y no sabemos si resultaron lesionados o no”.
Conforme avanzaron las horas empezó a oscurece aunado a que se sintieron los primeros efectos del frente frío número 10 de la actual temporada invernal, por lo que rápidamente se nubló, cayó la noche y hasta las seis de la tarde los cuerpos de los infortunados jóvenes, así como los restos de la aeronave, personal de la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas no había procedido a levantarlos, argumentando que era jurisdicción de la Procuraduría General de la República (PGR), por ser un asunto de aeronáutica civil, cuyos peritos especializados en la materia levantaron las pruebas correspondientes para posteriormente dar un dictamen del percance aéreo.
CERRADA LA CARRETERA
Debido a este accidente aéreo, el tráfico vehicular en la carretera Altamira-Morón-Aldama fue cerrado por elementos de Protección Civil y de las diferentes fuerzas federales, ya que los cuerpos de los jóvenes quedaron esparcidos en la cinta asfáltica y se pretendía no entorpecer el levantamiento de pruebas periciales.
El eje carretero comprendido de 130 kilómetros de longitud entre este municipio y Aldama es una vía interestatal ampliada en el sexenio del entonces gobernador Egidio Torre Cantú, siendo una vía de comunicación que automovilistas de la zona sur de Tamaulipas emplean para desplazarse durante el día hacia la frontera norte de la entidad.
El tráfico vehicular, en el que se observó una gran cantidad de camiones de carga y autobuses de pasajeros, estuvo detenido durante más de cinco horas, además muchos estudiantes de educación media superior residentes de ejidos de Altamira y de Aldama quedaron varados, pues su transporte fue demorado a causa de este trágico accidente.
Los restos de la aeronave de un motor fueron levantados cerca de las nueve de la noche y hasta las 22:00 horas fue reabierta la circulación vial en esta carretera.
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