/ jueves 11 de abril de 2024

Fractal / A todos nos enseñan lo que el dinero puede comprar, pero no lo que no tiene precio

Por dinero se traiciona, se mata, se miente, se olvida, se corrompe alma y mente, dando espacio a ese gran velo de apatía en donde se hace presente, sólo el ego de una especie a la cual se enseña desde su más temprana edad...

A saber todo lo que el dinero puede comprar, pero jamás se les hace mención de todo lo que el dinero no compra y en realidad es lo fundamental.

Sin ser adivino sé que en los próximos meses viviremos una época crítica en cuestión hídrica y año tras año será peor.

Podemos cuestionarnos el ¿por qué nadie hace nada para prevenir está tragedia?

Y la respuesta es muy simple, estamos más preocupados por explotar selvas, manglares, bosques y todos los lugares que pueden brindar una retribución monetaria con la derrama turística, en nombre del “progreso” sin importar que estamos rompiendo el ciclo natural del agua.

Reitero mi postura…

Bajemos unas cuantas rayitas a nuestro ego y dejemos de sentirnos Atlas, no somos la especie que le da sentido a este planeta.

Sólo somos un gran número de primates sin pelo ni cola extremadamente confundidos, en base a lo realmente prioritario para un buen funcionamiento natural.

Podemos hacer cadenas de hoteles, trenes turísticos, industrias gigantescas pensando egoístamente sólo en el beneficio de una sola especie, mirando con la frente muy en alto, con semblante triunfal, como todo eso que el dinero no puede comprar, se escapa de nuestras manos como arena, sí, como arena.

Porque a final de cuentas, las zonas más visitadas de nuestro país son las que cuentan con hermosas áreas naturales, pero sí realizamos obras sin importar que dentro de un tiempo no existirá fauna, selvas, agua, etc.

El chiste se cuenta solo, el turismo no visita zonas sin agua.

Somos una especie que vive el momento, hoy le damos valor al dinero, esperemos un tiempo y veremos cómo la naturaleza nos enseñará lo que realmente es valioso y no se compra.

Sólo tengamos presente esta máxima ancestral.

Cuando el último árbol sea cortado, el último río envenenado, el último pez pescado, sólo entonces, las personas se darán cuenta de que el dinero no se puede comer.

O ¿Usted qué opina?

Regeneración 19.

Bajemos nuestro ego y dejemos de sentirnos Atlas, no somos la especie que le da sentido a este planeta.

Por dinero se traiciona, se mata, se miente, se olvida, se corrompe alma y mente, dando espacio a ese gran velo de apatía en donde se hace presente, sólo el ego de una especie a la cual se enseña desde su más temprana edad...

A saber todo lo que el dinero puede comprar, pero jamás se les hace mención de todo lo que el dinero no compra y en realidad es lo fundamental.

Sin ser adivino sé que en los próximos meses viviremos una época crítica en cuestión hídrica y año tras año será peor.

Podemos cuestionarnos el ¿por qué nadie hace nada para prevenir está tragedia?

Y la respuesta es muy simple, estamos más preocupados por explotar selvas, manglares, bosques y todos los lugares que pueden brindar una retribución monetaria con la derrama turística, en nombre del “progreso” sin importar que estamos rompiendo el ciclo natural del agua.

Reitero mi postura…

Bajemos unas cuantas rayitas a nuestro ego y dejemos de sentirnos Atlas, no somos la especie que le da sentido a este planeta.

Sólo somos un gran número de primates sin pelo ni cola extremadamente confundidos, en base a lo realmente prioritario para un buen funcionamiento natural.

Podemos hacer cadenas de hoteles, trenes turísticos, industrias gigantescas pensando egoístamente sólo en el beneficio de una sola especie, mirando con la frente muy en alto, con semblante triunfal, como todo eso que el dinero no puede comprar, se escapa de nuestras manos como arena, sí, como arena.

Porque a final de cuentas, las zonas más visitadas de nuestro país son las que cuentan con hermosas áreas naturales, pero sí realizamos obras sin importar que dentro de un tiempo no existirá fauna, selvas, agua, etc.

El chiste se cuenta solo, el turismo no visita zonas sin agua.

Somos una especie que vive el momento, hoy le damos valor al dinero, esperemos un tiempo y veremos cómo la naturaleza nos enseñará lo que realmente es valioso y no se compra.

Sólo tengamos presente esta máxima ancestral.

Cuando el último árbol sea cortado, el último río envenenado, el último pez pescado, sólo entonces, las personas se darán cuenta de que el dinero no se puede comer.

O ¿Usted qué opina?

Regeneración 19.

Bajemos nuestro ego y dejemos de sentirnos Atlas, no somos la especie que le da sentido a este planeta.