Procurar una mejor educación, más allá de los conflictos bélicos en 1942, fue el motivo primordial que llevó a la promulgación del Día del Bibliotecario en Iberoamérica, y en Tampico existen ejemplos de dedicación en este bello oficio y desde la fundación de bibliotecas en la zona se ha mantenido el compromiso de educar, cultivar e innovar.
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Un ejemplo de trabajo constante en las bibliotecas es Angélica Elizabeth Rangel Morales, quien con 57 años de trayectoria comparte el día de hoy, en el marco de la fecha, un poco de las experiencias compartidas a lo largo de estos años, preparación, personajes importantes en la literatura del puerto, eventos y más.
"Yo ingresé en 1964, al principio no sabía nada, poco a poco aprendiendo tomaba los libros y leía los índices para recomendar a los usuarios. Algo curioso que uno como bibliotecario debe aprender es que a los usuarios hay que confesarlos para saber cuál es el tema que quieren, porque a veces dicen que buscan un libro, pero el tema que ellos quieren puede estar en otro".
Desde su llegada a la biblioteca "Jesús Quintana" ubicada en el Palacio Municipal de Tampico la distinguida bibliotecaria tuvo la oportunidad de convivir con un importante grupo de personalidades como la Mtra. Cecilia Sanz de Ridaura, el Padre Carlos González Salas, Enrique Esqueda, asegurando que todas las personas son importantes.
"Una vez llegó un jovencito de secundaria y me dice Quiero conocer las maravillas del mundo, y le saqué un libro, él fue y se sentó, anotó las páginas y me entregó el libro, me surgió la duda porque casi no tardó y le pregunté que si había encontrado algo y me dijo Sí, pero este libro lo tengo en mi casa, ahí entendí que no todos sabían utilizarlos".
EVOLUCIÓN DESDE 1995
Durante la charla, Elizabeth recorre la biblioteca que ha sido parte de su vida durante muchos años, en donde ha podido conocer a un gran número de personas que se han convertido en casi hermanas, el recinto que despide un olor a papel antiguo que en ningún otro espacio podrá ser apreciado y asegura que ha sido testigo de una evolución importante.
"Me da mucho gusto ver la evolución, ahí donde está el módulo de computación hace muchos años estaba el área de consulta, había libros, revistas, enciclopedias, pero se puso ese módulo y permitió la digitalización porque permitía que muchos jóvenes realizaran sus consultas ya en una computadora".
Angélica Rangel recuerda que la Biblioteca Municipal tuvo importantes momentos en donde se notaba una importante afluencia de personas, ya que estudiantes de las Facultades de Derecho, Medicina y Comercio de la UAT realizaban ahí sus trabajos de investigación ante la falta de bibliotecas en Tampico.
La convivencia entre usuarios, las compañeras y talleristas hacían que el día a día de Eli, como la llaman sus compañeros, fuera muy ameno, haciendo que con el paso del tiempo ella se convirtiera en un elemento importante.
LAS CAPACITACIONES
Una de las inquietudes de la bibliotecaria era la reparación y conservación del acervo literario, lo cual la llevó a experimentar diversos trabajos para mantener cada libro en perfectas condiciones, lo cual llamó la atención de sus superiores que la enviaron a diversas capacitaciones con el fin de mejorar su desempeño.
"La doctora veía que yo reparaba los libros y me traía telas, posteriormente me enviaron a Ciudad Victoria a cursos de reparación de libros y ahí aprendí tres técnicas: pegado, cocido y amarre, todo fue muy bonito; nunca me imaginé que iba a llegar a eso".
Al ser una de las personas más capacitadas en reparación de libros, Elizabeth tuvo la oportunidad de compartir sus conocimientos en diversas universidades como el Tecnológico de Monterrey, el IEST, la UPN, con el fin de que en esas instituciones cuidaran las obras literarias.
RECOMENDACIONES
La también integrante de la Red Nacional de Bibliotecas aseguró que todos los libros tienen un lugar especial en su corazón, siendo "El galano arte de leer" uno de sus favoritos por las historias ahí plasmadas y las enseñanzas que deja.
"Lamento mucho todo lo que ha pasado durante este tiempo, pero me gustaría que las nuevas generaciones se acerquen a la biblioteca, que no estén tanto en internet, conozcan los libros, aquí tenemos una sala infantil en donde hay libros muy bonitos".
Elizabeth Rangel expuso que hasta el día de hoy en la biblioteca "Jesús Quintana" se cuenta con una importante colección de libros y recomendó visitar el acervo de escritores tampiqueños, ya que se cuenta con una importante colección de piezas que invitan a vivir un recorrido por la zona conurbada.