Mario Montaña, “El Caballero Negro”, “América Salvaje” y “El Potente” fueron cuatro personajes de la lucha libre que le dieron realce al deporte de las llaves y los costalazos en la década de los sesenta hasta su retiro en el año 2005, luego de una brillante trayectoria que puso en alto a la zona sur de Tamaulipas.
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QUIÉN LOS INSPIRÓ
Efectivamente, cuatro personajes del arte del pancracio pero que en un caso inédito en este rudo deporte les diera vida un hombre que desde niño sintió la inquietud de practicar esta disciplina la cual llevó a la realidad a los 16 años de edad en 1966, siendo su maestro Alejandro el “Jabalí” Montaña, el cual le vio cualidades para destacar, de ahí su primer nombre de batalla; nos referimos a Crescencio Castro Villanueva, un nombre que no dice nada pero con sus personajes dice todo y quien dignificó la lucha libre mexicana.
Posteriormente y ya posicionado en los primeros planos, optó por cambiar su nombre surgiendo “El Caballero Negro”, debido a su técnica y a su empatía con los aficionados recordando un combate que sostuvo contra otro técnico que también brillaba en esa época, refiriéndose a “El Caballero Azul”, quienes protagonizaron un gran espectáculo y fueron reconocidos por el público lanzándoles monedas a la lona, como una manera de reconocer su trabajo.
En 1978 y por cosas del destino no llegó un luchador a un duelo de parejas programado en la función estelar en el Auditorio Municipal de Tampico y en ese instante el promotor Carlos “El Brujo” Duarte le dijo: tú vas, pero con otro personaje, naciendo "América Salvaje", quien acompañó al gran Lobo Rubio para enfrentarse a Black Man y José Torres; como El Caballero Negro hizo pareja con Cosmos 2000 durante diez años llenando las arenas donde se presentaban.
LA ÚLTIMA PRESENTACIÓN
Su última presentación fue en el Auditorio Municipal de Tampico en 2005, en un duelo de tercias ya convertido en “El Potente”, llevando como compañeros a Munra y Alejandro Montaña, siendo sus rivales las Arañas Malignas I y II con Eddie López; recuerda que enfrentó a grandes rivales entre ellos a la Fiera de Pachuca Ruddy Valentino, Relámpago Gutiérrez, Oso Matius, Asesino Negro, El Verdugo, Carnicero Aguilar, Astro Rey, Bucanero, Canelo Mendoza y a Tamba, un luchador muy corpulento que pesaba 150 kilos, “pero aquí lo que cuenta es la destreza y la técnica”, concluye don Crescencio Castro Villanueva, quien ahora en el retiro de la lucha libre y jubilado como buzo profesional de Pemex, disfruta con su familia y recuerda sus épocas de gloria en los encordados.