En los últimos años se ha presentado un aumento en la prevalencia de ciertas enfermedades reumáticas en personas jóvenes, debido a que experimentan diferentes cambios en su estilo de vida como: sedentarismo, que los lleva a enfrentarse a la obesidad, estrés y la exposición a factores ambientales.
La médica cirujana, Graciela Guadalupe Arana Franco, informó que estas constituyen una de las primeras causas de padecimientos crónicos en la adolescencia y engloban tanto a enfermedades sistémicas autoinmunes, como las conectivopatías y vasculitis; artropatías crónicas, artritis idiopática juvenil y las espondiloartropatías juveniles.
Comentó que el sector de la población bajo esta condición experimentan: dolor, rigidez, fatiga, inflamación y otros síntomas, los cuales llegan a afectar su capacidad para participar en actividades cotidianas y disfrutar de una vida plena y saludable.
Mencionó que las consecuencias orgánicas de estos procesos y la vivencia psicosocial de la enfermedad compromete el desarrollo físico y psíquico de los adolescentes e impactan desfavorablemente tanto en pacientes y familiares como en la sociedad.
Un diagnóstico temprano siempre ayudará
Agregó que en la actualidad no hay ninguna enfermedad o dolencia del aparato locomotor que reciba el nombre de “reuma” o “reumatismo”, sino que fue la sociedad quien agrupó a todo el conjunto de dolencias o molestias relacionadas con el aparato locomotor a consecuencia del desconocimiento de su naturaleza y la creencia en una causa común para todas ellas.
“En adolescentes son menos frecuentes que en adultos y ancianos pero llegan a representar una de las primeras causas de enfermedad crónica en esta fase de la vida junto a la diabetes y la epilepsia” dijo.
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El traumatólogo, Francisco Castañeda Cruz, hizo mención que cada 18 de marzo se conmemora el Día Mundial de las Enfermedades Reumáticas de la Juventud; la fecha tiene como objetivo, el crear conciencia sobre estás patologías, el diagnóstico temprano, su tratamiento y apoyo adecuado para mejorar cualquier pronóstico.
Destacó que los tratamientos pueden variar dependiendo del tipo y la gravedad de la enfermedad pero generalmente incluyen una combinación de medicamentos, terapia física y cambios en el estilo de vida. Algunos de los más comunes incluyen:
- Los medicamentos antiinflamatorios no esteroides para aliviar el dolor y reducir la inflamación
- Los medicamentos modificadores de la enfermedad para tratar enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide
- La corticosteroides ayuda a reducir la inflamación y controlar los síntomas
- Las terapias físicas para mejorar la fuerza muscular, la flexibilidad y la movilidad
- Las terapias ocupacionales para aprender a realizar actividades diarias con menos molestias y dolor
- Los cambios en la dieta y el ejercicio para mantener un peso saludable y reducir el estrés en las articulaciones
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Otra de las cosas que explicó el especialista que en casos graves, deben de recibir cirugía para reparar o reemplazar articulaciones dañadas.
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Ambos especialistas coinciden que es de suma importancia el trabajar en estrecha colaboración con un médico o reumatólogo para desarrollar un plan de tratamiento individualizado y adecuado para tratar las enfermedades reumáticas en personas jóvenes, mismas que han ido en aumento en los últimos años.
