El Síndrome de Asperger forma parte de los Trastornos del Espectro Autista (TEA) en el que el cerebro de la persona funciona de manera diferente a lo habitual, especialmente en la comunicación e interacción social y en la adaptación a las demandas del día a día.
Muchas veces este es mal diagnosticado, como déficit de atención o hiperactividad, por lo que se tiene que acudir con un especialista para conocer con certeza a qué obedece el comportamiento de los hijos.
La fundadora de Asperger Tampico, Olga Patricia Martínez González dijo que en el año 2013 el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales realizó algunos cambios para evitar tener que trazar líneas divisorias entre los trastornos clásico y el Síndrome de Asperger y los juntó a todos en Trastorno del Espectro Autista.
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DESAPARECE DE LA CLASIFICACIÓN DE ENFERMEDADES
En la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE) se podía encontrar el Síndrome de Asperger, hasta que en 2013 fue anunciada la undécima edición de este manual donde el Síndrome de Asperger desaparece por completo como entidad diágnóstica.
Es un tipo de autismo que afecta la manera en la que una persona interpreta el idioma, se comunica y socializa. En la actualidad a los niños que presentan señales de Asperger se les diagnostica autismo y se les considera como parte del “espectro autista”.
BUSCAR UN ESPECIALISTA
Los signos del síndrome de Asperger pueden asemejarse a los de otros problemas del comportamiento, lo más conveniente es que un médico u otro profesional de la salud evalúe los síntomas.
Martínez González explicó que a muchos niños se les diagnostica trastorno de déficit de atención con hiperactividad, antes de recibir el adecuado a Trastorno del Espectro Autista.
LOS SíNTOMAS DEL ASPERGER - TEA
Los niños con este padecimiento podrían tener los síntomas de interacciones sociales mínimas o inadecuadas, conversaciones que casi siempre tratan sobre sí mismos, lenguaje cifrado, robótico o repetitivo.
Hay además falta de sentido común, problemas para leer, escribir y para la matemática, obsesiones con temas complejos como ciertos patrones visuales o musicales, capacidades cognitivas no verbales por debajo de la media, aunque las verbales suelen ser normales o superiores a la media, movimientos extraños, comportamientos y gestos extraños.
APOYO DE LOS PADRES
El diagnóstico presenta desafíos tanto para los niños como para sus padres, pero se puede ayudar a los hijos a adaptarse y ofrecerle apoyo de muchas maneras, regularmente con programas de educación o entrenamiento para padres.
El Síndrome de Asperger o TEA no tiene cura, pero con los apoyos adecuados se puede alcanzar una buena calidad de vida. Debiendo recibir la ayuda lo antes posible por un equipo multidisciplinar de psiquiatras, psicólogos, neurólogos, trabajadores sociales, logopedas y educadores.
EN TAMPICO
En la zona se cuenta con la agrupación Asperger Tampico, a cargo de la señora Olga Martínez y Ana María Gojón, quienes brindan apoyo, información, soporte familiar y actividades lúdicas, pero con motivo de la pandemia están suspendidas.
Se considera que el Síndrome de Asperger afecta de 3 a 7 niños por cada 1000, de entre 7 y 16 años de edad. Las cifras no son exactas, pero se reconoce que es un trastorno que afecta más frecuentemente a los niños que a las niñas.
Actualmente no existe un número determinado de niños con este síndrome en Tamaulipas al no ser diagnosticados o por desconocimiento de sus padres.
Muchos niños con Asperger asisten a escuelas comunes, en las que sus avances dependen del apoyo y el estímulo de los padres, las personas que los cuidan, los maestros y los compañeros de clase.
