Cuando una persona nace, los demás suelen preguntar: ¿qué es? Durante mucho tiempo la respuesta se limitó a dos opciones: niño o niña. En la actualidad, se aboga por el reconocimiento de una tercera opción: no binario.
El género no binario apunta la posibilidad de no autodeterminarse únicamente como hombre o como mujer.
Bajo este término se hace alusión a una identidad diversa que combina tanto comportamientos como habilidades socialmente atribuidas a los géneros femenino y masculino respectivamente.
Identidad de género no binario: aprender a hablar sobre ella
De acuerdo a la Asociación Americana de Psicología es usual que las personas consideren que su identidad de género va más allá de las categorías binarias usuales.
Hablar de manera abierta sobre esta clase de temas, apunta la Organización Planned Parenthood, puede ayudar a disminuir los índices de estrés emocional, depresión, angustia y ansiedad que en ocasiones experimentan las personas no binarias al tratar de construir y comprender su identidad.
La Real Academia Española otorga al término “no binario” la acepción: “Dicho de una persona que no percibe su identidad de género en términos binarios de hombre o mujer”.
El Centro de Investigaciones y Estudios de Género de la UNAM define la misma terminación como: “personas en las que fluye a la vez lo femenino y lo masculino”.
Yo solo soy yo y mi "yo" es muy amplio
En EL SOL DE TAMPICO hablamos con alguien que se denomina de género no binario. Quien prefiere ser reconocida como María José porque hubiera podido ser José María: “La identidad no es una carretera de una sola ruta.
Me costó entender eso. Cuando era niña le pedía a los payasos que me dieran una espada de globos, en lugar de una flor o un perro.
En ese tiempo también quería una pista de carros para Navidad y aprender esgrima. En la universidad usaba cartera y me gustaba encender los cigarros de los demás, pero también quería ser atractiva para los hombres y para las mujeres.
Quería ser tratada como una dama, pero tener comportamientos y hábitos típicamente asignados a los caballeros. Descubrí que mi identidad tiene nombre: soy de género no binario”, concluye la entrevistada.
El “National LGBT Health Education Center” apunta que la identidad de género es fluida y no corresponde necesariamente al sexo asignado al nacer o a la orientación sexual.
Es decir, una persona que al nacer es nombrada como femenina, al crecer puede considerarse no binaria. Es importante aclarar que la orientación sexual, ya sea heterosexual, homosexual, bisexual, pansexual o asexual, es independiente de la identidad de género.
De lo privado a lo público: el derecho a ser reconocido en términos legales
En Tamaulipas, a nivel jurídico solo existe una persona acreditada con género no binario. El trámite se llevó a cabo en la segunda oficialía del Registro Civil de Ciudad Madero y se concretó durante el mes de octubre de este año.
La Organización Hivos sostiene que todas las personas tienen el derecho jurídico de ser reconocidas acorde a su identidad.
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La libertad de expresión es un derecho inalienable. En pleno uso de su conciencia, cada quien puede reconocer cuál es su identidad de género.
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Las opciones más comunes para expresar la identidad eran: niño/hombre o niña/mujer, pero ahora las posibilidades se han ampliado de manera pública, también existe el género no binario.
