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La pandemia del coronavirus trajo no solo enfermedad y muerte para muchos tampiqueños, también es la causa de la pérdida de empleos, el cierre de negocios y la caída en los ingresos en la mayor parte de los ciudadanos.
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Hay historias de superación y esfuerzo que deja la pandemia como la de las hermanas Lluvia y Rubí, originarias de Pueblo Viejo, Veracruz que todos los días cruzan en lancha el Río Pánuco para vender paletas en Tampico, con muchas ganas de salir adelante este par de jovencitas apoyan en su casa con dinero para la comida.
Antes trabajaban en una panadería en Tampico, pero desde que empezó la pandemia las ventas bajaron y fueron despedidas.
Ahora se dedican a vender paletas en el crucero de la calle Altamira y Aduana en la zona centro de Tampico para poder llevar un dinero a su casa y apoyar a sus padres.
Si quiere apoyarlas las puede encontrar en esa zona vendiendo sus paletas a los automovilistas con una gran sonrisa y un cartel que dice “Le obsequio una paleta para poder comer, con lo que guste apoyarme de corazón, gracias que Dios lo bendiga”.
Ambas trabajan de esta forma pues no han logrado encontrar un nuevo empleo, ya que hay poca oferta de trabajo en la zona debido a que muchos negocios y empresas han cerrado, dejando la pena de lado, y porque la necesidad no espera ellas decidieron a pedir ayuda de esta forma para poder subsistir al coronavirus.
