Como destellos de luz que se abren paso entre la contaminación ordinaria de Tampico y la zona conurbada, las mariposas amarillas van brotando de las copas de los árboles, sin dar tregua a sus alas que parecen no cansarse.
Es así como atraviesan las también conocidas como "mariposas verde limón" por la región sur de Tamaulipas en una travesía que marca la migración de esta especie, que viene de Norteamérica hacia regiones más cálidas del sur de México y Centroamérica.
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Revoloteando en parques y jardines o en vuelo abierto al cruzarlas calles y avenidas, las mariposas color suerte o fortuna llaman poderosamente la atención.
La presencia de estos lepidópteros se observan prácticamente en toda la zona metropolitana, dando un espectáculo natural digno de detenerse a observar.
Migración de mariposas verde limón, un hermoso ciclo que atraviesa Tamaulipas
“Se trata de la migración de las mariposas amarillas o mariposa verde limón, que pasa por esta zona entre agosto y septiembre”, dijo Miguel Ángel Verástegui Cavazos, presidente de la agrupación Ambientam.
Amplió que estos insectos “tienen un comportamiento similar a la mariposa monarca y pese a que pasa cada año por la zona son muy pocos, o mejor dicho casi nada, los estudios que se tienen al respecto”.
Agrupaciones como Ambientam buscan alianzas con organismos como Conservadores de la Biodiversidad y Educadores Ambientales (Cobea) e instituciones educativas para poder realizar un estudio a detalle de esta especie migratoria en su paso por la región.
Las mariposas amarillas inspiraron a García Márquez: un espectáculo digno de Macondo
Las mariposas amarillas que cruzan por la zona son de las pocas especies diurnas, ya que la mayoría se mueven de noche.
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Son, quizá, las mismas mariposas amarillas que menciona Gabriel García Márquez en su obra “Cien Años de Soledad”, aquellas que algo tenían que ver con Mauricio Babilonia, y a las que hace referencia el tema “Macondo”, escrito por Oscar Chávez, donde describe a las mariposas amarillas como aquellas que vuelan liberadas.