Con la operación del gasoducto sur de Texas-Tuxpan, nuestroestado será un importante centro de energía del país, que sesuma a la red existente para facilitar el acceso de empresasprivadas y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) al abastode gas natural en Altamira.
Con la construcción del gasoducto submarino, mediante unainversión superior a los 2 mil 100 millones de dólares, Altamirase fortalece como la región con mayor capacidad de recepción ydistribución de combustibles, particularmente gas, así como lageneración de energía eléctrica.
Carlos Ruiz Sacristán, presidente del Consejo deAdministración de IEnova, una de las socias del proyecto, destacóque el gasoducto submarino será el primero operado en México poruna empresa privada y por sus características como la longitud demás de 800 kilómetros y puntos de conexión, tendrá la capacidadde transportar un tercio del gas que consume el país.
Refirió que el objetivo de traer del sur de Texas gas naturales ofrecer este insumo a precios competitivos y con facilidad parael acceso de abasto por parte de empresas privadas y de la CFE.
La construcción del gasoducto submarino se concluirá a finalesdel próximo año.
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