El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que el caso del secuestro de cuatro estadounidenses -de los cuales dos fueron asesinados- en Matamoros, fue convertido en un escándalo por parte de sus adversarios en ambos lados de la frontera.
“Hicieron un escándalo nuestros adversarios allá y acá. Nosotros tenemos que terminar la investigación para saber con precisión que sucedió e informar aquí cuál fue la causa, ya se está haciendo la investigación para informar”, dijo este miércoles en la conferencia mañanera.
Amplio que “no deja de haber politiquería aquí y allá -México y Estados Unidos- ya hemos hablado de eso pero tenemos que trabajar juntos respetando nuestras soberanías, es que antes se metían al país y ellos decidían, por eso hasta me extraña como es que no supieron lo de Garcia Luna si trabajaban juntos”.
La cooperación entre corporaciones mexicanas y agencias de inteligencia estadounidenses para dar con los ciudadanos de dicho país se dio en cooperación y sin intervencionismos.
“Ahora hay cooperación pero con respeto a nuestra soberanía y así lo entiende el presidente Biden, siempre ha sido muy respetuoso”, refirió.
Secuestro y asesinato no mina relación entre México y EU
El presidente desde Palacio Nacional consideró que este caso no mina la relación binacional, aún cuando se ha calificado como el de mayor exigencia del gobierno de Estados Unidos a Mexico para dar con los responsables.
“No, para nada, incluso vienen los legisladores mañana, estará la asesora de la Casa Blanca para el tema o asunto del fentanilo como a las 12:00, a lo mejor Carmen Aristegui va a decir que viene a regañarme, pero en fin”, refirió el mandatario.
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Hay que trabajar en ambos lados de la frontera
El día de ayer el embajador Ken Salazar aseguró que la violencia contra ciudadanos estadounidenses en Tamaulipas demuestra la imperante necesidad de actuar contra los cárteles de la droga que operan del lado mexicano.
Al lamentar el hecho y dar la condolencias a las familias apuntó que “estos hechos de violencia son un trágico recordatorio que nos exige reafirmar el compromiso de nuestros gobiernos para asegurar nuestra frontera compartida y fortalecer el combate a las organizaciones criminales trasnacionales”.
Recordó las alertas de seguridad emitidas para no viajar a Tamaulipas “representa un riesgo por los altos niveles de criminalidad y violencia. Nos preocupa particularmente el control que ejerce el Cártel del Golfo en la zona conocida como la frontera chica”, apuntó.
Al respecto López Obrador sostuvo que “hay que seguir trabajando, tiene razón para evitar la violencia aquí y allá, en Mexico y en Estados Unidos, y cada quien tiene la responsabilidad de garantizar en sus países la paz y la tranquilidad”.
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El mandatario dijo que el actuar de las fuerzas del orden para localizar a los estadunidenses fue la correcta “se actuó bien porque pronto se encontraron a las personas, dos fallecidos, un herido, otro bien y se atendió esta situación de urgencia muy lamentable con los familiares de las víctimas”.
Desde Palacio Nacional el presidente aseguró que el caso del secuestro y asesinato de estadounidenses en Matamoros se ha convertido en un escándalo por los adversarios políticos de su gobierno tanto en México como en Estados Unidos.
