El gran escritor colombiano Gabriel García Márquez decía que el enamoramiento podía ser fácilmente comparable con los síntomas de una epidemia. Inseguridad, temor, ansiedad, agitación y retortijones de estómago muchas veces, al igual que los del cólera, enfermedad infecciosa que sigue azotando a la humanidad hasta el día de hoy sobre todo a las poblaciones más pobres del mundo.

Afortunadamente, ya existe la vacuna contra esta epidemia, mas no la hay para el enamoramiento, dijo Gabo al presentar su exitosa novela “El amor en los tiempos del cólera”.

Los personajes de su novela sostienen un enamoramiento comparado con la terrible pandemia, y narra cómo puede llegar a ser un cielo o un infierno un amor desesperado. Encuentros y desencuentros amargos y dulces durante cincuenta años. La novela termina maravillosamente bien ya que los enamorados terminan navegando por el río Magdalena con una bandera amarilla atada al mástil fingiendo estar en cuarentena sanitaria sin arribar a puerto seguro y así disfrutar su amor en tiempos del cólera.

Hoy, que los mexicanos nos encontramos en nuestros hogares siguiendo las recomendaciones sanitarias para no contraer el coronavirus que nos ha venido a dar una “voltereta” en nuestro diario vivir, les recomiendo leer esta joya de la literatura universal.

El humor es también un buen recurso para soportar el confinamiento, ya que es un mecanismo para afrontar el tedio y el temor ya que estamos enfrentando los mexicanos una pandemia mundial que ya ha infectado a más de 600 mil personas y más de 27 mil muertos en 188 países, y ha dejado en confinamiento en sus hogares a millones de personas. Afortunadamente muchas personas se niegan a dejar que las circunstancias les quite el sentido del humor. ¡¡Bien hecho!!

Nos han llegado graciosos “memes” por Whatsapp o en diferentes redes sociales. Muchos de ellos muy ingeniosos poniendo a flote el maravilloso sentido del humor del mexicano. Reír es también una vacuna.

“La convivencia es un Acto Heroico”, dijo Woody Allen, pero lo podemos hacer agradable y conveniente para las relaciones familiares. Y hacer lo correcto, para no tener que poner la bandera amarilla en la puerta de nuestra casa.

El humor es también un buen recurso para soportar el confinamiento, ya que es un mecanismo para afrontar el tedio y el temor